Dicha nava transportaba alrededor de 65 kilos de metanfetamina y más de 200 gramos de fentanilo.
Tras monitorear el área, oficiales de Operaciones Aéreas y Marítimas, detectaron una aeronave desconocida que ingresó a los Estados Unidos aproximadamente a las 23:00 horas.
Elementos rastrearon electrónicamente el avión y dirigieron a unidades terrestres de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos, en su camino hacia un lugar de aterrizaje improvisado al sur de Tucson.
Los oficiales encontraron la aeronave abandonada en un camino rural de tierra, con dos grandes contenedores de plástico colocados en el fuselaje, y unidades caninas inspeccionaron el avión y descubrieron los paquetes con las drogas dentro de los contenedores.
Los estupefacientes y la aeronave fueron incautados y transportados a la Estación de la Patrulla Fronteriza de Nogales, pero no fue posible localizar al piloto.