Es llamado "biopsia líquida" y tiene la capacidad de estudiar el ADN de la sangre para prever los daños eventuales por tumores.
La biopsia líquida ya habría sido utilizada en 161 pacientes a quienes se le detectaron cáncer en pulmones, próstata y mama con resultados de 90 por ciento de acierto y para los tipos de cáncer difíciles de detectar se acertó en el 55 por ciento de los casos.
La prueba busca desarrollarse y aplicarse como un método de rutina, parecido a los que se realizan para detectar el colesterol y la presión arterial alta, de concretarse la prueba se espera que las muertes por cáncer disminuyan en 50 por ciento.








