Guerra de Alfonsos

El mandatario estatal está decidido a evitar a toda costa que las casetas de cobro de Sonora sean “liberadas” por diversos grupos sociales, en el entendido de que muchos de los recursos ahí captados de seguro irán a las campañas electorales.

A nadie extraña ni asusta eso. Ya desde tiempos en que el PRI era el soberano, en Sonora la caja chica de los gobiernos eran las casetas de cobro, que no por nada se multiplicaron como hongos por la humedad.

En tanto, Canaán Castaños también tiene la mira puesta, supuestamente, en la eliminación de las casetas de cobro, toda vez que los programas supuestamente encaminados a que los sonorenses no paguen el peaje, no han dado los resultados esperados, por la burocracia federal o por lo que usted guste y mande.

Este lunes, en la caseta de cobro de Hermosillo, algunos manifestantes se encaminaron a dejar libre el paso de los automovilistas, pero como ya están advertidos los empleados del lugar, más temprano que tarde llamaron a las autoridades para avisar de la situación.

Enseguida, un “enjambre” de patrullas estatales y de la Guardia Nacional hizo acto de presencia y “convencieron” a los manifestantes de que no era una buena idea hacerse de las casetas para cobrar por su cuenta.

Ni tardo ni perezoso, Canaán Castaños se quejó en redes sociales: “Gobierno de Alfonso Durazo tirano, REPRESOR y corrupto, se aprovecha con toda la fuerza del Estado en contra de gente indefensa que reclaman justicia”, escribió.

Lo cierto es que, después de haber estado incrustado en el gabinete de Durazo Montaño, el dirigente del movimiento denominado Libre Tránsito, salió echando pestes de la administración estatal, sobre todo porque consideró una mentira el acuerdo para que los sonorenses puedan tener el beneficio de pasar por las casetas sin pagar un centavo.

Sea o no cierto, Canaán Castaños deslizó la versión de que algo del dinero de las campañas políticas en Sonora surgió precisamente de la orden del entonces opositor Morena de hacer “boteo” en las casetas de cobro, pero cuando ese partido llegó al poder, en 2021, se ha negado a cumplir los acuerdos pactados de libre tránsito.

Otros grupos al interior de Morena, enojados por no haber sido tomados en cuenta por la administración estatal, estallaron también cuando se supo que los manifestantes de la caseta de cobro fueron desalojados violentamente ayer:

“Gobierno represor y abusivo, ¿Que no era el PRI el que reprimía y criminalizaba la lucha social? Recuerdo que algunos de los que hoy están en altos puestos como Alfonso Durazo y el superdelegado Taddei se enrollaban en la Bandera de México criticando a los represores y hoy son ellos los que reprimen, ésta es la verdadera transformación y lo que nos espera a quienes no estemos arrodillados ante ellos...”, comentaron en las redes sociales.

Yo no sé qué pasó entre los dos Alfonsos, pero lo cierto es que el capricho de ambos por mantener su postura, ciertamente está dañando a Sonora, pues entre más Canaán Castaños descubre “intimidades” de los del poder, más se empecinan ellos en no gestionar una solución en el tema de las casetas de cobro.

Así que la exigencia de los sonorenses es que ya se dejen de pleitos o simulaciones y de una vez por todas aporten soluciones a los viajeros que usan las casetas de cobro, que no es una solicitud de ayer sino que desde 1991 es una demanda de los sonorenses a la que muy poca atención se le ha brindado desde el gobierno, sabedores de los altos ingresos de esos sitios.

Sonora no puede darse el lujo de que los policías, federales o estatales, sean usados para la represión en las casetas de cobro. Esos elementos deben destinarse, con el mismo vigor que contra los manifestantes, a combatir al crimen organizado, que día a día se apodera de zonas enteras de la entidad, a pesar de que haya quienes consideren que los delitos “van a la baja”.

Que la transformación no fecunde solamente la mentalidad de los políticos que ayer consideraban ilegales las casetas de cobro y hoy no pueden soportar que alguien toque esa fuente de financiamiento tan apetecible.

Despertar al Sonora bronco puede ser cuestión solamente de una chispa porque la mecha está ya bastante cortita.

EN CORTITO