El grito de Claudia: una lección de historia patria

Sin ser historiadora de profesión, fue más allá del discurso tradicional para dar un lugar a las mujeres insurgentes y llamarlas por su propio nombre

El grito de Claudia: una lección de historia patria

Nunca había sentido tanto orgullo de ser profesor de historia como la noche del pasado 15 de septiembre, cuando la presidenta Claudia no sólo cumplió con el ritual del Grito, sino también dio una clase magistral de historia patria, reconociendo algunos nombres de mujeres independentistas nunca antes mencionados en semejante acto conmemorativo.

Sin ser historiadora de profesión, la presidenta fue más allá del discurso tradicional de realzar las figuras de los próceres varones, para dar un lugar estelar a las mujeres insurgentes y llamarlas por su propio nombre, sin sujetarlo a los apellidos de sus maridos.

¡Viva Josefa Ortiz Téllez-Girón!, exclamó la mandataria nacional. Luego mencionó a Leona Vicario, "Benemérita Madre de la Patria"; Gertrudis Bocanegra y a María Manuela Medina, quien con el grado de capitana de su propia compañía echaba balas contra las tropas realistas.

No acostumbro ver el Grito en televisión, pero esta vez lo hice no sólo por ser el primero en la historia que lo daba una mujer presidenta, sino también picado por la curiosidad de saber dónde pondría foco, el énfasis y demás revelaciones.

No puedo negar que me llenó de emoción, alegría y orgullo constatar que tenemos una presidenta culta, leída y que no sólo conoce bien la historia del país, sino además es uno de sus más grandes orgullos.

No puedo poner punto final sin antes reconocer la sensatez de otra gigante femenina, Elena Poniatowska, quien opinó: "Me hubiera gustado que le echara un viva a doña Rosario Ibarra de Piedra y a las madres buscadoras".

ricardoaragon60@gmail.com