El caso de una primaria
Los regidores étnicos
En más de un sentido, y según cierta propaganda, al sistema escolar de este país quizá poco le faltaría para estar casi más allá de la perfección. Todo es cuestión de escuchar algunos discursos oficiales en la materia. Pero es obvio que todo esto no suele compaginarse con la realidad. Por desgracia, hay que subrayarlo así, lejos de asumir alguna enfermiza celebración.
Sin embargo, a veces en el torrente informativo de todos los días, es posible toparse con episodios que, teniendo lugar en centros educativos, se antojan verdaderamente increíbles. Es el caso, por ejemplo, del que se ha producido en la Escuela Primaria Escuadrón 201 de la colonia Aves del Castillo, de Cajeme. Allí se ha generado el problema de un maestro que presenta características verdaderamente increíbles.
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En calidad de mientras, madres de familia con hijos en la propia escuela decidieron tomarla como evidencia de protesta por la situación imperante. Una vocera dijo que tienen tiempo “batallando” con el maestro a que se alude. Y de ser ciertas las acusaciones que han salido a relucir, entonces se estaría frente a una situación muy complicada o en extremo fácil de resolver, como quiera verse.
Es así porque al maestro de esta trama lo acusan de una llamativa variedad de actitudes impropias o poco recomendables. Juzgue usted: al parecer hurta los teléfonos de los niños y los acosa al igual que las niñas, se roba el dinero de los pequeños en los eventos escolares, no aporta a la escuela recursos, que al parecer allí todo mundo los brinda, para el velador, y así. Por lo visto, todas estas conductas se han venido repitiendo desde años atrás con cargo al mismo protagonista, según denunció una madre de familia. Aunque otra más dijo que los hechos descritos empezaron en el plantel desde el año pasado.
Debe ser importante saber desde cuándo y cómo se vienen ejerciendo hechos como los reseñados. Pero debe resultar todavía más perentorio que se tomen las debidas cartas para que esos hechos no se repitan más. Con ese propósito, un grupo de madres de familia asumió tomar las instalaciones de la escuela primaria Escuadrón 201. Pero lo curioso es que el director, Martín Padilla González, reveló que desde el año pasado se abrió un proceso contra el maestro al que se alude. El mecanismo está fincado en el terreno jurídico de la Secretaría de Educación y Cultura y, según esto, no duerme allí el sueño de los justos, ya que está en pleno curso. Mientras tanto, en una solución temporal que más parece reconocimiento, el maestro de esta siniestra historia ha sido cambiado de grupo en diversas ocasiones. ¿Con qué propósito? Quién sabe.
En otro género de asuntos, trascendió ya, como era propio que sucediera, la actitud que asumirán quienes resultaron perjudicados (vamos a decirlo así) con la designación por insaculación de regidurías étnicas en el sur de la entidad. Básicamente se procederá a una impugnación ante el Tribunal Estatal Electoral.
La objeción por lo visto será en serio, en tanto que la ejercerá el llamado Gobierno Tradicional de los Ocho Pueblos Mayos. Prueba de ello es que Ramón Wilfredo Armenta Gastélum, asesor jurídico de uno de los gobernadores mayos, señaló que debió llevarse a cabo una elección en lugar de un sorteo o una rifa.
Allí está de nuevo el término (rifa) o la actitud que tanto ha llamado la atención en el proceso electoral que se comenta. Hoy se ha puesto de relieve que lo deseable fue que se haya llevado a cabo una elección en cada municipio en lugar del procedimiento por el que se optó. Éste, por lo visto, sirvió esencialmente para dividir a los integrantes de la Etnia Mayo.
Las cosas en ese conglomerado tribal suelen ponerse tensas ante hechos como los descritos. En este contexto, el asesor Armenta Gastélum reprochó que una vez más, como en otros años, el proceso de que se habla no se haya efectuado con base en los usos y costumbres de la etnia. Dijo que eso ocurrió así en virtud de la “intromisión e imposición” de 14 “gobernadores duales” y grupos políticos. Señaló que todo esto fue en complicidad con autoridades del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas y la Comisión Estatal para el Desarrollo de los Pueblos y Comunidades Indígenas.
¿La misma historia de siempre en el contexto de las comunidades indígenas? Por lo visto…
armentabalderramagedo@gmail.com