Desarrollo económico y social a la inversa

Y desde el quehacer de los negocios y el trabajo, no tienen la misma situación ahora que cuando se pensó a sentir el desplazamiento del virus del Covid-19, que en un principio poco se le puso atención.

Pero al final llegó de manera destructiva la mayoría de las sociedades del planeta y a México en todos sus rincones, donde se pensaría que en esos lugares no impactaría por su lejanía.

Y hoy en día es otra situación la que se vive al sentirse que ya la pandemia no es ahora tan letal como al principio y poco a poco la sociedad mexicana está en camino a la normalidad.

Donde esa normalidad que se quería, tiene su realidad en la situación que presentan los municipios de Sonora y de todo el país, donde lo que más tienen son problemas financieros.

Y que además presentan una cantidad de rezagos en la atención a la ciudadanía, que muchas de las veces hace imposible la convivencia en las ciudades y sus comunidades, por la cantidad de problemas acumulados.

Que lo que menos se tiene es la capacidad de resolverlos con la velocidad que corresponde, como lo demanda la ciudadanía.

Pero todo requiere recursos económicos para hacerlo y en muchos de los problemas puede ser que los presupuestos de todo el periodo, no alcanzarán para resolver los más prioritarios al cien por ciento.

Y todo porque los gobiernos anteriores no hicieron la tarea que les correspondía, al fin y al cabo, el que viene después de ellos ya lo resolverá, decían, y así era la costumbre y nadie la observaba.

Lo que ha hecho que esa sea una historia repetitiva en muchos de los municipios, donde la responsabilidad de cada representante popular no es aplicada, porque al parecer no hay cómo hacerlo.

Y lo que sí es real, es el colapso de muchas necesidades de servicios públicos, por falta de atención y hoy en día por falta de presupuesto, que a esto con unos meses más se le agregara el factor tiempo.

Pero que será necesario avanzar en los denominados rezagos públicos, para que sea la base de esta responsabilidad para que los gobiernos posteriores pongan el total de su disposición y los eliminen.

En un municipio olvidado con bastantes rezagos, mucho será lo que logren avanzar los gobiernos en turno para terminar con ellos, pero también existe un elemento que ayudará mucho.

Y este es el no ser propositivos con los comentarios, con lo cual se refieren a su ciudad y comunidades rurales, con malestar natural y la crítica política, porque no está ayudando en nada.

Porque muy bien se pudiera haber hecho cuando se notaba que el municipio iba en declive en sus servicios públicos y en su desarrollo económico y al no hacerlo se llegó a lo que hoy se ve.

Muchas veces el camino más fácil y más cómodo, es el criticar lo que falta, sin retomar su posición de ciudadano y su responsabilidad de participación para el lugar donde se vive avance.

La costumbre siempre ha sido pasiva y no activa, que es lo que corresponde en una comunidad que desea el progreso para sus familias y eso se logra con la participación en el hacer y en el decir.

No se puede hablar de manera negativa del lugar donde se vive y pensar que todo es responsabilidad del gobierno; es importante pensar que es mejor sumar que restar en la convivencia por una mejor sociedad.

No se puede hacer el esfuerzo por parte de unos pocos ciudadanos y otros diciendo opiniones negativas de donde se vive, porque es un efecto directo de ellos mismos, haciendo con ello desarrollo económico y social a la inversa.

DEL ESCRITORIO