La Inteligencia Artificial (IA) ya no solo compone, interpreta o produce música: también obliga a replantear las reglas del juego, por lo que, en respuesta a su creciente presencia en la industria musical, Spotify, una de las plataformas de streaming más usadas en el mundo, anunció una serie de medidas para etiquetar y regular el contenido generado con esta tecnología.
Fundada en Suecia en 2006, Spotify revolucionó la forma en que consumimos música, ofreciendo acceso a millones de canciones, podcasts y audiolibros bajo un modelo de suscripción y gratuito con publicidad. Con más de 600 millones de usuarios en todo el mundo, se ha convertido en un referente global en el sector del entretenimiento digital.
TRANSPARENCIA ANTE TODO: SPOTIFY ETIQUETARÁ LA MÚSICA CREADA CON IA
Así las cosas, a partir de ahora Spotify comenzará a identificar públicamente aquellas canciones que contengan voces, instrumentos o procesos de producción generados mediante inteligencia artificial. Esto se hará a través de una etiqueta especial visible para los usuarios, con el objetivo de dar mayor claridad sobre cómo fue creada la música que escuchan.
Para lograrlo, la compañía adoptará un nuevo estándar de metadatos llamado DDEX (Digital Data Exchange), ampliamente utilizado en la industria para compartir información sobre obras musicales. Esta herramienta permitirá a discográficas, distribuidoras y socios musicales reportar de manera estandarizada el uso de IA en sus producciones.

“Este cambio se trata de fortalecer la confianza en toda la plataforma. No se trata de castigar a los artistas que usan la IA de forma responsable ni de bajar la clasificación de las pistas por revelar información sobre cómo se crearon”, afirmó Spotify en un comunicado.
Además de etiquetar el contenido generado con IA, Spotify anunció nuevas políticas contra la suplantación de identidad, un fenómeno cada vez más frecuente con el uso de herramientas que clonan voces de artistas sin su consentimiento.
La plataforma ahora especifica cómo gestionará reclamos sobre imitaciones vocales no autorizadas, protegiendo a los artistas y brindándoles canales más claros para denunciar este tipo de fraudes. También reforzará su lucha contra quienes suben música falsa al perfil de otro artista, una práctica fraudulenta que se ha extendido con el auge de la IA.
UNA REGULACIÓN NECESARIA EN UN NUEVO PANORAMA MUSICAL
Con estas acciones, Spotify busca equilibrar la innovación tecnológica con la ética y la transparencia. Si bien reconoce el potencial creativo de la inteligencia artificial, también pone límites para garantizar un entorno seguro, justo y confiable tanto para creadores como para oyentes.
En un mundo donde ya no es fácil distinguir entre lo humano y lo artificial, Spotify marca el camino hacia un consumo musical más informado.