La vida se les fue en un bocado a 40 integrantes de una pandilla en Haití, luego de que comieran empanadas con veneno, las cuales les fueron vendidas por una mujer.
De acuerdo con la información, la fémina usó aceite de oruga, el cual es usado también como pesticida, por lo que fue detenida.
Se indicó que la mujer les ofreció de comer a los pandilleros, quienes tras haberlas degustado con mucho agrado, al poco empezaron a sentir los efectos de la toxina.

Tras haberse ido, los tipos fueron a la casa de la vendedora y la atacaron; sin embargo, esta ya se había ido.
La mujer corrió a las autoridades para confesar lo que había hecho y, además, pidió que le protegieran; entonces se le detuvo y presentó ante el Ministerio Público.
Los síntomas que los tipos padecieron fueron: dolor de estómago y luego convulsionaron; como no pudieron ser atendidos médicamente, sobrevino la muerte.
Según medios haitianos, la fémina dijo ante el MP que había actuado sola; sin embargo, no creen su versión y piensan que pudo haberse tratado de un ajuste entre bandas antagonistas en disputa por el territorio.

Y cómo no, si desde el 2024, Haití ha sufrido una grave crisis humanitaria, y datos de Amnistía Internacional los derechos humanos son inexistentes en ese país.
Por otra parte, los grupos delincuenciales han sembrado el terror y la violencia en la zona metropolitana de Puerto Príncipe y sus alrededores; entre las aberraciones que cometen están violación y otras formas de violencia sexual; de entonces a la fecha han muerto más de 5 mil 600 personas.