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Cardenal del Vaticano es sentenciado a más de 5 años de prisión

El veredicto contra Giovanni Angelo Becciu marca un hito histórico, al convertirse en el primer cardenal condenado por un tribunal de la Santa Sede

Cardenal del Vaticano es sentenciado a más de 5 años de prisión

Una trama de intrigas financieras, lujo desmedido y transgresiones morales llega a su punto culminante en el "juicio del siglo" del Vaticano, donde el cardenal italiano Giovanni Angelo Becciu, exaltado en tiempos anteriores como uno de los líderes más poderosos de la Santa Sede, ha sido sentenciado a cinco años y medio de prisión.

Este veredicto marca un hito histórico, convirtiendo a Becciu en el primer cardenal declarado culpable y condenado por un tribunal del Vaticano.

El tribunal del Vaticano, tras dos años y medio de minucioso juicio, dictaminó que Becciu fue responsable de diversos delitos financieros relacionados con una inversión multimillonaria en una propiedad de lujo en Londres. En esta arriesgada operación, la Santa Sede desembolsó más de 570.000 euros, destinados a una consultora que, sorprendentemente, utilizó los fondos para su propio beneficio personal.

El proceso judicial, presenciado por un panel de tres jueces, no solo puso a prueba la culpabilidad de Becciu, sino que también arrojó luz sobre una red de malas prácticas financieras que involucraron a otros nueve acusados. Entre ellos, Cecilia Marogna, asesora de seguridad, quien fue condenada a tres años y nueve meses de prisión por malversación de cientos de miles de euros, autorizados por Becciu y destinados a la liberación de una monja secuestrada.

La batalla legal, liderada por el papa Francisco en su empeño por purificar las finanzas del Vaticano, tuvo implicaciones significativas. Para asegurar que Becciu enfrentara la justicia, el pontífice se vio obligado a modificar la legislación eclesiástica. Además de la pena de prisión, al cardenal se le prohibió de por vida ejercer cargos públicos, y se le impuso una multa.

En un giro inesperado, el abogado de Becciu reafirmó la inocencia de su cliente y anunció la intención de apelar el veredicto. Entre los otros condenados se encuentran dos financieros italianos con sede en Londres, Raffaele Mincione y Gianluigi Torzi, quienes recibieron sentencias de cinco años y medio y seis años, respectivamente.

Este desenlace marca un capítulo crucial en la cruzada del papa Francisco por la transparencia en el Vaticano. Las celdas del Vaticano podrían no ser suficientes para albergar las condenas más largas, ya que se contempla la posibilidad de cumplir las penas en una prisión italiana.

Antes del juicio, el papa destituyó a Becciu de sus funciones y le privó del derecho a votar en futuros cónclaves, rompiendo así su estrecha colaboración con el ahora condenado cardenal.