buscar noticiasbuscar noticias
Farándula

Mauricio Ochmann confiesa que fue alcohólico a los 8 años

El actor de “El Chema” que el sentirse abandonado y la sensación de soledad lo hicieron refugiarse en el alcohol cuando era un niño, situación que puso su vida en peligro

Mauricio Ochmann confiesa que fue alcohólico a los 8 años

El actor Mauricio Ochmann sorprendió al contar una serie de sucesos que vivió cuando era niño, entre ellos el abandono de sus padres cuando era muy pequeño, por lo que se sentía muy solo y desamparado.

Ochmann platicó que vivir una infancia tan complicada y solitaria lo dejó marcado, por lo que se refugió en el alcohol desde los ocho años, hasta que fue adoptado por una pareja mexicoestadounidense, que le brindó un hogar.

El tener una familia le dio nuevamente un poco de estabilidad, pero tiempo después sus padres se divorciaron y se fue a vivir con su madre adoptiva, pero de nuevo se volvió a sentir solo.

 “Siempre, durante mi niñez, mi infancia, mi adolescencia, siempre estuve buscando esa identidad, ese pertenecer, ese quién soy”, comentó el actor.

La constante frustración que llevaba a cuestas lo hizo caer más en el vicio, además, la necesidad de conocer a sus padres biológicos estaba siempre presente, pero, cuenta, en esa época no era fácil que le dieran información de las personas que lo dieron en adopción.

Cuenta que lo único que pudo averiguar es que su madre fue una joven estadounidense de 15 años y su padre un español de 16, por lo que su nacimiento fue producto de un “amor de verano”.

El exesposo de Aylinn Derbez contó que en su adolescencia su adicción al alcohol iba en aumento, al grado que formaba parte de su vida diaria.

 “Con todos esos fantasmas y ese rollo que estaba viviendo me gustó la sensación, la fuga de todo lo que sucedía cuando bebía”, aseguró.

El intérprete de “El Chema” dijo que a los 16 años se fue a vivir con su padre biológico y fue cuando tocó fondo, ya que su enfermedad lo tuvo al borde de la muerte. Fue en ese momento que decidió superar sus miedos, tomar terapia y decidió renacer.

“Llegué a la conclusión que mi felicidad dependía de mí. Yo soy mi propia madre, mi propio padre, mi propio adulto responsable y mi tranquilidad y felicidad dependía de mí, por lo que me enfoqué en trabajar en mí y superar mis traumas”, concluyó.