Las restricciones de actividades por Semana Santa les afecta de forma directa, ya que el lugar es un punto de concentración turística donde los paseantes aprovechan para comprar el pan tradicional.
Los hornos lucen apagados y hay puestos cerrados, otros aún siguen funcionando, pero han reducido su producción en más de un 50 por ciento.
"Nosotros elaboramos como unos ocho kilos de harina diariamente, ahorita por esta contingencia estamos haciendo 4 o tres kilos", lamentó Víctor Ochoa, propietario de panadería La Cabañita, ubicada en Pueblitos.
Hasta el momento, desconocen qué tipos de apoyos económicos les ofrecerá tanto el Gobierno del Estado como el Gobierno Federal, para poder hacer frente a la crisis económica.
"Nosotros vivimos al día, debemos trabajar para comer, de esto nos mantenemos casi todas las familias del pueblo", comentó.