Viviendas en abandono son usadas como nido de malvivientes; además, la falta de iluminación por las noches ayuda a que se cometan robos
Deniss Cabrera
Casas abonadas que son utilizadas como nido de malvivientes, falta de iluminación y robos constantes, son algunas de las quejas de los habitantes de Plano Oriente, problemas que desde hace años han empeorado.
Tal es el caso de la calle General Álvaro Obregón y el callejón del Ferrocarril, en donde los baldíos y viviendas solas se han convertido en focos de infección al ser utilizados como basureros, refugio para drogarse e incluso baños.
Ante esto los vecinos del sector manifestaron que es necesaria mayor vigilancia por parte de las autoridades, así como la instalación de alumbrado público, ya que salir de noche es riesgoso.
"Hay mucho malviviente, uno no se puede sentar afuera porque pasa gente con cuchillos, roban, hay asaltos, en varias partes de la colonia está así", manifestó Elizabeth, vecina de la calle Álvaro Obregón.
Leticia Villa, habitante del sector, señaló que en el callejón del Ferrocarril todas las lámparas se encuentran fundidas, lo que es un riesgo latente, ya que en los vagones del tren se refugian indigentes y trampitas.
"El servicio público es pésimo, el callejón es donde peor está, casas abandonadas, malandrines, todos los focos están rotos, pedimos mayor vigilancia".
Los habitantes del sector agregaron que incluso el pasar de noche por el paso a desnivel es un riesgo, ya que está rodeado de edificios solos y oscuros donde se esconden los asaltantes.