Ciudad Obregón

Para Aduana, donaciones



Por: Luz del Carmen Paredes

"Al momento de cruzar la línea, me toca el semáforo verde.Me disponía a continuar el viaje, cuando una agente de la aduana de Nogales, Sonora, me marcó el alto y me pidió los pasaportes y la registración del vehículo, con el argumento de que tenía que verificar si el carro era de mi propiedad. Al confirmarlo, empezó otro interrogatorio y me pregunto qué traía, pero de manera prepotente”, señaló.

Respondió que eso era ilegal, porque si eran donaciones no entraban dentro de la franquicia que cada individuo tiene.

“Su respuesta fue que tenía que esperar para hacer un pedimento en aduana, y le dije que no podía esperar; entonces, me dijo que si quería pasar las cosas en ese momento tenía que pagar dos mil 500 pesos.Acepté, pero mi error fue decir que iba a quejarme”, subrayó.

Entonces, explicó, la actitud de la agente aduanal, Carolina Talledos, cambió de forma radical.

De manera agresiva se regresó y le entregó la licencia de manejar, diciendo que por ahí no pasaba, que tenía que regresar a Estados Unidos con las cosas.

“Me amagó diciendo que a ella no le importaba a dónde fuera quejarme; al final, tuve que dejar las cosas: tres sillas de ruedas para adulto, un par de muletas, siete andaderas para adulto y tres caminadores, firmando un acta de abandono de mercancía”.

“Y como yo, otras personas también fueron detenidas y obligadas a dejar lo que traen a México, por lo que la fundación a la que pertenezco, y a título personal, pedimos a las autoridades competentes que tomen cartas en el asunto, ya que se está afectando a terceros.En mi caso los artículos iban a ser donados a personas de escasos recursos”, concluyó.

  • Le informe que pertenezco a la Fundación Itepo-emac A.C. Estoy Contigo, integrada por vecinos de la Comisaria de Esperanza, y que periódicamente les llevo sillas de ruedas, muletas, andaderas y otros artículos que se entregan a la gente más necesitada, y que nunca había tenido ningún problema