El olor a humedad no solo es molesto, también puede impregnarse en la ropa, la madera y el ambiente del clóset.
Este tipo de olor es causado principalmente por la acumulación de humedad en espacios cerrados y poco ventilados, lo que favorece la aparición de moho y bacterias.
CONSEJOS PARA EVITAR QUE TU CLÓSET HUELA A HUMEDAD
Ventila y deja entrar luz natural
Abre las puertas del clóset con regularidad y, si es posible, permite que entre luz solar directa. Esto ayuda a secar el ambiente y reduce el exceso de humedad. La ventilación es clave para mantener un espacio fresco y libre de malos olores.
Usa absorbentes naturales
El arroz, el bicarbonato de sodio, el carbón activado o las bolsitas de gel de sílice son excelentes opciones para absorber la humedad del ambiente. El carbón activado, por ejemplo, no solo atrapa el exceso de humedad, también neutraliza los olores sin dejar fragancia. Además, es reutilizable si se expone al sol regularmente.
Guarda solo ropa completamente seca
Una de las causas más comunes del olor a humedad es almacenar ropa que no ha terminado de secarse. Asegúrate de que cada prenda esté completamente seca antes de guardarla en el clóset, ya que incluso la humedad mínima puede generar malos olores y la formación de moho.

MEDIDAS COMPLEMENTARIAS
Limpieza con vinagre
Realiza una limpieza profunda del clóset al menos una vez al mes usando una mezcla de agua y vinagre blanco. Esto eliminará bacterias y hongos, dejando el espacio más higiénico.
Controla la humedad ambiental
Procura mantener la temperatura entre 18 y 20 grados y la humedad relativa por debajo del 60%. Estos niveles ayudan a prevenir la condensación y la aparición de moho en el hogar.
Utiliza un deshumidificador
Si tu clóset no tiene buena ventilación, un pequeño deshumidificador puede ayudarte a mantener bajo control el nivel de humedad. Existen modelos compactos y silenciosos diseñados especialmente para espacios reducidos.