Bordado de "Sonic" provoca discusión entre madres
"O te mando la sudadera de mi hijo o se lo quitas a la del tuyo", reclama la mujer a una señora que hizo sentir especial al suyo. ¿Usted qué haría?
Luego de dos años de ausencia en las escuelas, el regreso a clases trae consigo el ajetreo de la compra de útiles escolares y demás actividades, como en el caso de los niños de preescolar, donde les piden a los papás que graben el nombre de sus hijos en sus artículos, o que los distingan.
Y una mamá, queriendo hacer sentir a su niño especial, y a fin de no rayar las prendas, le bordó en la solapa de su sudadera la figura de su personaje favorito: Sonic.
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Sin embargo, ese hermoso gesto casi fue empañado por la molestia de la mamá de un compañerito de su hijo quien, vía WhatsApp, le hizo un reclamo descabellado.
De acuerdo con las capturas de pantalla de la conversación, la mujer recibió un mensaje en el que le decía que su niño le había comentado que su compañero de clase llevaba bordado a Sonic, que también era "muy fan de ese muñeco", y que ese hecho causó un alboroto en el salón; además de aclararle que no encontró un sitio que le hiciera ese trabajo.
Cortésmente, la mamá del pequeño respondió que ella, debido a que no ponía datos personales de su pequeño, fue que ella misma bordó el personaje, y que si deseaba le mandaba el patrón para que ella también lo bordara.
La respuesta de la otra fémina fue sorprendente, porque, en vez de agradecer, contesta diciéndole que no tiene tiempo, que ella trabaja, y que cómo le hacían, pues o le mandaba la sudadera del niño o le quitaba el personaje a la del suyo, que le pusiera el nombre de su hijo; así todos quedarían conformes.
Incrédula, la señora contesta que no le dedicara tiempo a su hijo para hacerlo sentir especial, y también le aclara que no bordará la sudadera de su niño, ni tampoco le quitará el bordado al de ella y se despide.
Pero cuando parecía terminar, la mujer que se sintió agraviada le contesta que estaba mal, al enseñar a su hijo a ser pretencioso y presumido, y que cuando el chico creciera le pesaría.
Finalmente, la señora responde que le dedicara tiempo a su retoño, que ella se encargaba del suyo.
