Estoy dispuesto a casarme contigo -le dijo el labioso galán a la linda chica a la que cortejaba con pérfida intención-. Pero tú sabes que soy jefe de ...
En la merienda de los jueves las señoras evocaban sus amores de juventud, algunos de ellos bastante tormentosos. Manifestó en tono terminante la señor...