Por: Fabián PérezPero debido a la rebeldía y renuencia de las administraciones, sin importar el color, del 2003 a la fecha, aún en la actualidad no ha podido lograr la ejecución de la sentencia que así lo determinó, explicó.
Dijo que tanto el contador Grajeda Valenzuela como su defensa, siempre han pugnado por una conciliación que favorezca a las partes, la cual ha sido imposible lograr.
Destacó que en la actualidad, los procedimientos de ejecución se encuentran avanzados y es oportuno, que para evitar desacatos y destituciones en su momento, las partes puedan negociar.
El representante legal del ex tesorero, expuso que el monto económico no se encuentra especificado y aún si hubiera, es susceptible a negociarse.
Cabe recordar que el ex tesorero declaró recientemente que el Municipio tiene que pagarle alrededor de 5 millones de pesos por el despido injustificado y salarios caídos de 2003 a 2018, pero está en la mejor disposición de negociar con el Ayuntamiento.
Incluso estaba en la mejor disposición de que le puedan pagar con bienes inmuebles y efectivo.
"En caso de que el Ayuntamiento no me cubra lo que por mandato judicial se me adeuda, tendría que negociar a la actual administración por incumplimiento de la ley, pero confío en que vamos a llegar a una negociación", reiteró.
En su momento, agregó, le fincaron responsabilidad por parte del ex alcalde José Guadalupe Curiel, de la pérdida de 40 expedientes de Obras Públicas y le hicieron observaciones sobre el uso del recurso del Ramo 33.
"En ese entonces el alcalde José Guadalupe Curiel, hizo una reunión de Cabildo en donde pidió mi destitución por haber perdido su confianza. Recuerdo que me dijo que se iba a encargar con la prensa de destruir mi imagen", recordó.
Finalmente, tras un resolutivo de un Tribunal Federal, ganó la sentencia judicial.
"Si la alcaldesa María del Rosario Quintero Borbón, no cumple con la resolución definitiva del incidente de mi liquidación, podría ser destituida, pero creo que vamos a llegar a un buen acuerdo", indicó.
