Aumento del 20% al salario incrementará la capacidad de compra

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Por: César Fraijo

El profesor en la Facultad de Economía de la Universidad de Sonora, explica que desde la óptica de los trabajadores, el planteamiento de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) es un paso más en la recuperación de su salario real y agrega:

“A un año de la administración del presidente López Obrador es evidente que se implementa una nueva política económica que busca fortalecer el mercado interno sin desatender el externo (...) lo cual constituye justamente un cambio de paradigma en lo que respecta a la política económica”.

Recordó que en 2109 el salario mínimo se incrementó de 88.36 a 102.68 pesos diarios y para el año 2020 será en promedio de 123.22 pesos por jornada diaria de trabajo, que corresponden a incrementos del orden del 16 y 20%, respectivamente. Sin olvidar que en la frontera en 2019 el salario mínimo se elevó a 176.72 pesos diarios, un cien por ciento.

El académico argumenta que el incremento al salario mínimo de los trabajadores como se ofreció a partir del próximo año, tiene su lógica debido a que de 1976 al 2018 este disminuyó aproximadamente en un 70% y cayó al nivel que se tenía en 1952.

Lo anterior, sostiene, a pesar de que el salario de los trabajadores había presentado un incremento superior al 300% de 1952 a 1976.

Agrega que desde 1983 la disminución del salario real se inscribía en la estrategia de ofrecer salarios bajos a la inversión extranjera para estimularla e incrementar las exportaciones, propósito estratégico del modelo neoliberal

En la política de redistribución del ingreso en México bajo dicho modelo, los márgenes financieros de las empresas se incrementaron en forma desproporcionada y en detrimento de los asalariados: “sin duda, esa política fortaleció a los empresarios e incrementó su capacidad productiva”, señaló del Pardo Escalante.

Esta situación, es decir, la concentración y acumulación de capital a las grandes y medianas empresas nacionales, -insiste- les permite hoy en día, soportar los actuales incrementos salariales recientemente anunciados, aunque deberán hacer los ajustes necesarios.

El también doctor en economía, señala que el incremento salarial sacará de la zona de confort, construida por más de 40 años, a los empresarios mexicanos, pero hay condiciones favorables para absorber estos incrementos con los arreglos ineludibles en las diversas áreas de sus empresas.