Arrestan a policía extorsionador

Aprovecharse de su cargo como Policía Municipal de Nogales para obtener un beneficio económico por medio de la extorsión llevó a Jorge "N." a quedar detenido en prisión preventiva por la imputación en este delito.


Jorge "N." junto con su compañero de trabajo Miguel Ángel "N." y posiblemente otro cómplice, llevaban a cabo extorsiones entre los médicos de la localidad, siguiendo el mismo patrón para obtener beneficios económicos.


Fue el 12 de junio de 2019 cuando un médico general presentó la denuncia ante la Fiscalía General de Justicia, para exponer el delito del que fue víctima.


Señaló que el día anterior, en uno de los consultorios perteneciente a una farmacia de la ciudad donde presta sus servicios, había recibido la visita de un paciente que dijo llamarse Óscar Humberto "N.", de nacionalidad estadounidense, quien acudía a consulta de parte de otro médico para que lo ayudara con una receta para comprar medicamentos controlados pues padecía de ansiedad.


El médico lo ayudó y le expidió la receta de los medicamentos señalados por el otro galeno, y el paciente se retiró del lugar.


Transcurridos alrededor de cinco minutos dos policías municipales arribaron a la farmacia buscando al médico general, argumentando que por fuera del consultorio encontraron a una persona sospechosa, que portaba entre sus pertenecías una receta de medicamentos controlados expedida por él y que esa acción era un delito federal.


El médico fue trasladado en la unidad oficial número 1809 a los patios superiores de la Delegación de la Zona Centro, conocida como C4. Durante el recorrido los policías le señalaban que si lo turnaban a la PGR iba a perder su cédula profesional, por lo que ya no iba a poder ejercer, porque lo iban a meter a la cárcel y para poder salir de ahí el monto mínimo de la multa que debería de pagar, sería aproximadamente de 100 mil pesos.


Al llegar a la delegación, los policías le sugirieron pagarles a ellos la cantidad de 50 mil pesos, a cambio de no enviarlo a la PGR; el doctor estaba preocupado, por lo que a través de una llamada telefónica buscó ayuda del propietario de las farmacias donde está el consultorio, le explicó lo ocurrido y le indicó el monto solicitado por los uniformados.


Además, uno de los policías de nombre Jorge "N." habló con el dueño de las farmacias y le reiteró que para no enviar al médico a la PGR tenía que cubrir el monto de 50 mil pesos, el empresario accedió a apoyar al galeno, y explicó que le depositaría esa cantidad en su tarjeta de nómina.


En cuanto supieron que el dinero había sido transferido, los agentes policiacos trasladaron nuevamente al médico, pero ahora en un automóvil particular hacia un banco para que retirara el dinero, no obstante, esto no fue posible, debido a que, por políticas de la institución bancaria, el dinero depositado debe permanecer al menos 24 horas en la cuenta donde fue almacenado.


Sin el dinero y dados los inconvenientes para recibir la cantidad solicitada, los uniformados trasladaron a la víctima a su consultorio y le indicaron que al siguiente día lo contactarían para recibir el dinero.