Semana Santa: ¿Por qué cambia de fecha cada año y qué lo determina?
Muchos se preguntan por qué la fecha de la Semana Santa varía de un año a otro, pero la respuesta se encuentra en una combinación de aspectos
La Semana Santa es una de las festividades más destacadas tanto para la comunidad católica como para trabajadores y estudiantes. Esta celebración, que abarca desde el Jueves Santo hasta el Domingo de Resurrección, también implica un período de descanso, ya que las autoridades suelen suspender clases y actividades laborales durante este tiempo.
Sin embargo, muchos se preguntan por qué la fecha de la Semana Santa varía de un año a otro, pero la respuesta se encuentra en una combinación de tradiciones religiosas y ciclos astronómicos.
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¿POR QUÉ CAMBIA LA FECHA DE SEMANA SANTA CADA AÑO?
Según un reporte de la revista National Geographic, la Iglesia Católica determina la fecha de la Semana Santa considerando los ciclos lunares y el inicio de la primavera.
La razón principal detrás del cambio de fecha radica en que la Semana Santa no sigue el calendario solar convencional ya que, a diferencia de otras celebraciones que están fijadas en fechas específicas, como Navidad o Año Nuevo, la fecha de la Semana Santa se calcula de manera diferente.
DESPUÉS DE LA PRIMERA LUNA LLENA DE PRIMAVERA
Desde los primeros tiempos del cristianismo, los seguidores recurrían a los evangelios para determinar la fecha de la muerte de Cristo. Esta fecha coincidía con la Pascua judía, que se rige por el calendario lunar.
Por lo anterior, la Semana Santa debe comenzar después de la primera luna llena de primavera, según lo establecido por el Primer Concilio de Nicea en el año 325.
Además, se acordó que la resurrección de Cristo siempre se celebraría en domingo, para evitar que coincidiera con la Pascua judía. Por lo tanto, la Semana Santa comienza el primer domingo después de la primera luna llena de primavera.
EQUINOCCIO DE PRIMAVERA
Aunque el equinoccio de primavera generalmente se sitúa entre los días 19 y 21 de marzo en el hemisferio norte, esta fecha también puede variar ligeramente debido a la órbita terrestre alrededor del sol.
Para corregir esta discrepancia, se añade un día extra a febrero cada cuatro años en lo que se conoce como año bisiesto.