SAT: Descubre 3 razones por las cuales puedes reducir tus impuestos legalmente
Es importante estar actualizado en temas fiscales para evitar problemas legales y también para conocer los derechos que tenemos como contribuyentes
En el engranaje económico de cada nación, los impuestos son la piedra angular que sostiene los gastos del Estado y, en México, la entidad encargada de gestionar este crucial componente es el Servicio de Administración Tributaria, conocido como el SAT.
Este organismo gubernamental vela por el cumplimiento de las leyes fiscales, recaudando las contribuciones de individuos y empresas involucradas en actividades económicas en el país.
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A pesar de que es un deber ciudadano contribuir al bienestar colectivo, el SAT ha compartido información que revela cómo, de manera legal, se pueden evitar ciertos pagos de impuestos sobre ingresos específicos.
A continuación, presentamos tres motivos respaldados por el propio SAT para aliviar la carga tributaria de los contribuyentes.
Es esencial tener en cuenta que los gastos e ingresos varían según el producto o servicio adquirido, y el SAT determinará la aplicabilidad de descuentos fiscales dependiendo del monto gastado. Además, la dependencia federal también cobra impuestos sobre los ingresos depositados en nuestras cuentas, pero es crucial identificar qué ingresos están exentos de estos pagos.
El Artículo 93 de la Normatividad del SAT se convierte en nuestra guía al describir las situaciones e ingresos que quedan exentos del pago de impuestos. Entre ellos, se incluyen reembolsos por gastos médicos, prestaciones del seguro social otorgadas por instituciones públicas, y subsidios por incapacidades, becas educativas, guarderías infantiles, actividades culturales y deportivas.
Si has recibido pagos relacionados con estas categorías, puedes estar seguro de que el SAT respetará la deducción de impuestos generados por estos ingresos, permitiéndote ahorrar considerablemente en el pago de tus impuestos.
Esta política de deducción específica está diseñada para respaldar la economía de los contribuyentes, evitando cargas adicionales sobre gastos esenciales como salud, prestaciones laborales o becas.
Es fundamental destacar que, para el año fiscal 2023, todos los contribuyentes tienen hasta el 31 de marzo de 2024 para cumplir con el pago de impuestos correspondiente, según lo establecido por el SAT en relación con las declaraciones anuales del Impuesto Sobre la Renta (ISR).
