AMLO instruye traer de regreso a Raquel Serur; embajadora declarada non grata en Ecuador
La expulsión de la embajadora Raquel Serur Smeke por parte del gobierno de Ecuador se produjo como respuesta a las declaraciones de López Obrador
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció hoy que su gobierno descarta romper relaciones con Ecuador luego de que el gobierno ecuatoriano declarara persona non grata a la embajadora mexicana Raquel Serur Smeke.
Esta decisión de Ecuador se produjo después de las recientes declaraciones del mandatario mexicano sobre el magnicidio del candidato ecuatoriano Fernando Villavicencio en agosto de 2023, las cuales generaron tensiones diplomáticas entre ambos países.
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REGRESO DE EMBAJADORA SERUR SMEKE
En una declaración desde Palacio Nacional, el presidente López Obrador aseguró que México no responderá de manera recíproca al declarar persona non grata al embajador ecuatoriano en México, Francisco Carrión Mena. En cambio, ordenó que un avión de la Fuerza Aérea Mexicana sea enviado a Ecuador para traer de regreso a la embajadora Serur Smeke.
"Nosotros no vamos a romper relaciones, ni vamos a hacer lo mismo con el embajador de Ecuador. Vamos a ir a buscar a Raquel Serur", declaró el presidente.
En consecuencia, el avión de la Fuerza Aérea Mexicana partirá en las próximas horas hacia Ecuador para traer de regreso a la embajadora mexicana. Mientras tanto, una misión se mantendrá en la Embajada de México en Ecuador para garantizar la continuidad de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
TENSIONES DIPLOMÁTICAS ENTRE MÉXICO Y ECUADOR
Cabe destacar que la expulsión de la embajadora Raquel Serur Smeke por parte de Ecuador se produjo como respuesta a las declaraciones del presidente López Obrador sobre el caso del asesinato del candidato ecuatoriano Fernando Villavicencio en 2023, lo cual generó tensiones diplomáticas entre ambas naciones.
Las declaraciones del presidente mexicano, donde insinuó una presunta injerencia del gobierno en el proceso electoral ecuatoriano, fueron recibidas con malestar por parte del gobierno ecuatoriano, quien las calificó como violatorias de la Convención de Viena.
