La presidenta de México, Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, desde el inicio de la presente administración planteó como parte del proyecto 2024 – 2030, el Plan de Fortalecimiento y Expansión del Sistema Eléctrico Nacional, que, por sus alcances y significación a mediano y largo plazo, constituye uno de los pilares de la Cuarta Transformación en términos de soberanía energética.
El plan contempla nuevos compromisos de mitigación del cambio climático, generación en un 35% de la energía eléctrica que requiere el país, procesos de energías limpias, descarbonizar el sector eléctrico, promover la innovación, e incorporar la energía solar como parte de una estrategia permanente de preservación del medio ambiente.
Con el anuncio de una inversión de alrededor de 22 mil millones de dólares, se activarán 51 proyectos a lo largo y ancho de la república, que, entre otros beneficios, buscan dotar a 500 mil hogares de energía eléctrica y alcanzar una cobertura del 99%. Asimismo, en materia de telecomunicaciones, se pretende alcanzar la cobertura de un 97%, que traería como beneficio la atención de 129 mil localidades de manera adicional.
Garantizar el suministro de energía eléctrica suficiente, sustentable, confiable y asequible, es una prioridad en el marco de una política pública en clave de derechos y de bienestar social. Por ello, en esta ruta por la soberanía energética, cabe destacar que la Comisión Federal de Electricidad CFE y Pemex, son las dos grandes fortalezas con que cuenta México.
Pemex con sus ocho refinerías funcionando a cabalidad, está produciendo el diésel y la gasolina necesarios para atender la demanda nacional, del mismo modo, la recuperación de la Petroquímica ha permitido una ampliación significativa en la producción de fertilizantes, los cuales en 2025 aumentaron en un 17% con respecto a 2024.
Por otra parte, la CFE y la Secretaría de Energía del Gobierno de México, trabajan actualmente en los Proyectos Termosolares, de los que no había precedentes y que hoy, definen la trayectoria de un México que respeta las energías limpias y provee el bienestar de la población en la prospectiva de las décadas venideras.
El arranque de este primer proyecto en su género se da en Baja California Sur con una inversión de 800 millones de dólares, para la creación de las dos primeras plantas generadoras de energía.
El Plan de Fortalecimiento y Expansión del Sistema Eléctrico Nacional avanza, lo que permitirá no solamente proyectar mejores escenarios de vida, desarrollo productivo y crecimiento económico de México, sino también, dar cumplimiento a los Acuerdos Internacionales suscritos por nuestro país, en el ámbito de la mitigación del daño climático, la transición a fuentes de energía renovables, la mejora de la eficiencia energética, la adopción de prácticas agrícolas regenerativas, así como la protección y restauración de bosques y ecosistemas críticos.
Hoy, la política energética nacional avanza con paso firme, como uno de los pilares de la Cuarta Transformación, articulando soberanía, justicia social y compromiso ambiental. Los esfuerzos impulsados por nuestra presidenta, la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, respaldados desde el Senado de la República, han permitirán fortalecer a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad como motores estratégicos del desarrollo, garantes del acceso a energía a bajo costo y de la rectoría del Estado sobre recursos estratégicos.
Con inversiones históricas en generación, transmisión y refinación, México se coloca en una ruta de autosuficiencia energética que, al mismo tiempo, abre espacio a la transición hacia energías limpias, la innovación tecnológica y la cooperación internacional. Este enfoque integral no sólo fortalece el bienestar de las familias mexicanas y la competitividad del país, sino que también consolida a la soberanía energética como una herramienta de cohesión social y de proyección geopolítica.
Con la Cuarta Transformación, la energía deja de ser una mercancía para reafirmarse como un derecho y un bien nacional, construyendo las bases de un México más justo, sostenible y soberano.
Desde este Senado refrendo mi respaldo solidario a nuestra presidenta en la construcción de este horizonte compartido.