La banca de fomento de ahora

Porque, de la otra forma, al no hacerlo simplemente se estaría cayendo en lo que se conoce como simulación y eso en estos tiempos, es lo que menos debe de ocurrir en una sociedad que requiere avances.

Y esto es cuando se habla de fomentar el desarrollo por instituciones de gobierno y las conocidas bancas de fomento que fueron creadas con ese objetivo, porque así lo requiere la sociedad para el impulso de sus sectores productivos.

Fomentar el desarrollo se veía como una función primordial, que le permitiera a las actividades productivas un respaldo, para avanzar al siguiente nivel económico y social.

Pero la historia estableció que mucho de lo dicho en este tema por las autoridades no fue lo que se esperaba, porque mucho quedo en la intención y ha sido mas que todo un pendiente, que no se ha resuelto hasta hoy.

Y puede ser que todo sea porque la inercia de los pendientes acumulado en años, no hayan permitido que en este siglo que apenas inicia, no se logre remontar la palabra fomento para que los productores primarios logren poner su parte.

Pero también, que les lleguen los beneficios del fomento productivo, a los micro y pequeños empresarios para que ellos reconociendo que todas las empresas y negocios empiezan desde pequeños, con los impulsos financieros también lleguen a crecer.

Es cierto que se debe de aspirar a ser productivos en todo lo que es el proceso de participación en la producción primaria y de transformación, pero aquí lo que es mas importante es hacer que lo demuestren los participantes.

Y para poderlo hacer, es necesario que exista la oportunidad de participar en el proceso productivo, allanándole el camino al productor primario y al empresario, no complicándole el propósito de producir para el desarrollo.

Es cierto que debe de existir responsabilidad productiva del adquiriente de un financiamiento, pero también la debe de existir por parte del financiero que dice que está fomentando el desarrollo y no nada más en igualar las tasas de interés del mercado.

Debe, sí, allanar el camino para que el sujeto del crédito pueda tener la confianza, de que cuenta con un respaldo, técnico, financiero y comercial, que le va a permitir, obtener los resultados óptimos en su actividad.

Porque si la banca de fomento al desarrollo, no opera con la flexibilidad y el soporte necesario que impulse el desarrollo económico y social de una región, entonces no está en el camino que se dijo, al denominarse así.

Porque los tiempos ahora se observa de manera diferente en el país y todo producto de la globalización y en eso no se puede ser ajeno, lo que hace que las bancas de fomento se suban a la modernidad que demandan los tiempos de apertura comercial.

Porque entendido está, que el desarrollo económico de una estado o región, no se puede medir en función de los niveles de la cartera crediticia, ojalá y se entendiera que primero debe de ser el fomento e inmediatamente la cartera.

DEL ESCRITORIO