Cajeme. Atrás quedaron las residencias con bellos jardines y fuentes; hoy prevalecen las fortalezas
A diferencia del pasado cuando se podían observar enormes jardines y hermosas fuentes, ahora las residencias parecen bunkers
Con el desarrollo agrícola y la bonanza del Valle del Yaqui vino también el que los hombres de campo obtuvieran ganancias considerables que se reflejaron en la edificación de hermosas y amplias viviendas, quienes se establecieron en lo que hoy se conoce como la zona norte de Ciudad Obregón.
De acuerdo a información proporcionada por el periodista Sergio Anaya, autor del libro Retrospectiva de Cajeme, en la década de los cincuentas y sesentas las residencias que se fincaron en la zona norte de Ciudad Obregón se caracterizaban por poseer enormes jardines y fuentes majestuosas.
Algunas de estos ornamentos aún sobreviven en jardines de la zona Norte de Ciudad Obregón con diseños diversos así como de materiales, empotradas en algun muro o bien, como centro atractivo del jardin.
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“El estilo arquitectónico que poseían los hogares se basada en residencias de California en Estados Unidos, en donde se encontraban mansiones con enormes jardines, nombrada la corriente estilo californiano”, compartió.
En la actualidad, al norte de la calle Náinari, punto que se toma como referencia para situar a los "viejos ricos" de la ciudad, se puede observar algunas de esas residencias; como la que se ubica en la calle Náinari esquina con Veracruz, o la que sobresale por su tamaño al abarcar la manzana que comprende las calles Náinari, Colima, Morelos y Tamaulipas, la cual posee un enorme jardín en el que cabe una privada de los recientes fraccionamientos fincados en las periferias de Ciudad Obregón.
SEGURIDAD CAMBIA LO ESTÉTICO Y ARTÍSTICO
Con el paso de los años las personas "de abolengo", optaron por cambiar el estilo abierto por un espacio privado, al colocar grandes muros que ofrecen intimidad a sus moradores, al impedirse la visión hacia el interior.
Del año 2000 a la fecha, las viviendas de "los adinerados" de Cajeme son basadas en una casa tipo bunker, con grandes bardas, algunas de piedra, portones automáticos y un sistema de cableado eléctrico que otorga la sensación de seguridad.
Esta ha sido parte de la transformación que han tenido las nuevas residencias en relación a los domicilios que se construyeron en los cuarentas y cincuentas con diseños que parecen sacados de un cuento de hadas.
Una tendencia que descifra el accionar de la sociedad y que se refleja en su arquitectura, en donde la inseguridad ha influido en el estilo de vida que han adoptado, pues hoy en día la protección que buscan y que llevan al lugar que habitan con sus familias ha llevado a algunos a construir verdaderas fortalezas.
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