El Bubble Tea, también conocido como té con tapioca, es una bebida originaria de Taiwán que combina té, leche o fruta con bolitas masticables
Por: Jhoanna Ontiveros Peraza
El Bubble Tea, también conocido como té con tapioca o té de perlas, ha conquistado paladares en todo el mundo y en México se ha vuelto una bebida de moda entre jóvenes y adultos. Su peculiar combinación de té, leche o fruta, y las famosas bolitas masticables que reposan en el fondo del vaso, lo hacen una experiencia sensorial tan divertida como deliciosa.
ORIGEN DEL BUBBLE TEA
El origen del Bubble Tea se remonta a Taiwán en la década de los 80. Aunque su autoría sigue siendo motivo de debate, dos locales se disputan el título de creadores. Por un lado, Chun Shui Tang, fundado en Taichung en 1983, asegura haber sido el primero en añadir perlas de tapioca al té con leche tras inspirarse en un viaje a Japón. Por otro, el Hanlin Tea Room, abierto en 1986 en Tainan, afirma que su fundador inventó la bebida al usar perlas blancas de tapioca hechas con almidón de patata.
Independientemente de quién lo haya creado, el Bubble Tea pronto se convirtió en un fenómeno juvenil en Taiwán y, posteriormente, en toda Asia. Su popularidad cruzó fronteras hasta llegar a América y Europa, donde se ha posicionado como un emblema moderno de la cultura taiwanesa.
¿SE MASTICAN O NO LAS BOLITAS DE TAPIOCA?
Respecto a su consumo, las bolitas de tapioca deben masticarse, no tragarse enteras. Estas perlas están hechas de almidón de yuca cocido y endulzado, lo que les da una textura elástica similar a la goma o la gelatina. Masticarlas dos o tres veces permite disfrutar su dulzura y consistencia, que contrastan con el sabor del té.
Además del placer gastronómico, masticarlas es importante por seguridad: al ser de tamaño considerable, tragarlas sin morder puede provocar riesgo de asfixia, sobre todo en niños pequeños. Por ello, los expertos recomiendan disfrutarlas con calma, saboreando cada sorbo.
La clave del Bubble Tea está en la experiencia completa: beber y masticar. Solo así se disfruta la armonía entre el té, la leche y las perlas de tapioca que han hecho de esta bebida un fenómeno global.