A pesar de los años recientes de bonanza con ventas récord, nuevos datos revelan una caída preocupante que podría marcar un cambio de tendencia
Por: Brayam Chávez
La industria de los videojuegos enfrenta un momento complicado, especialmente entre los jóvenes de 18 a 24 años, un sector que históricamente ha sido uno de sus principales consumidores.
A pesar de los años recientes de bonanza con ventas récord, nuevos datos revelan una caída preocupante que podría marcar un cambio de tendencia en el mercado.
VENTAS EN PICADA ENTRE LOS 18 Y 24 AÑOS
De acuerdo con un informe de la firma de investigación Circana, publicado por el Wall Street Journal, las ventas de videojuegos a este grupo de edad cayeron cerca de un 25% entre enero y abril de 2025, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El descenso es mucho más pronunciado que el de otros segmentos: las personas mayores de 25 años apenas registraron una baja del 5%, mientras que en los grupos de 25 a 34 y de 35 o más años las cifras se han mantenido relativamente estables.
En términos generales, los videojuegos se han convertido en la categoría con mayor caída dentro del gasto juvenil, superando incluso la reducción en rubros como accesorios, artículos para el hogar, pequeños electrodomésticos o ropa.
UN GOLPE DIRECTO AL BOLSILLO DE LA GENERACIÓN Z
Expertos señalan que esta disminución en las compras no es casualidad, sino el resultado de una combinación de factores económicos que afectan de forma particular a los jóvenes. Mat Piscatella, analista de Circana, lo describe como una "tormenta perfecta" de obstáculos financieros.
La dificultad para acceder a empleos estables es uno de los principales problemas. Muchos recién graduados enfrentan un mercado laboral marcado por despidos y alta competencia, especialmente en el sector tecnológico. Este panorama limita el poder adquisitivo y obliga a priorizar gastos esenciales.
A esta situación se suma el regreso de los pagos de préstamos estudiantiles en Estados Unidos, tras el fin de las moratorias por la pandemia, lo que reduce aún más el presupuesto para ocio y entretenimiento.
DEUDAS Y PAGOS QUE DEJAN POCO MARGEN PARA JUGAR
Los jóvenes también encabezan las estadísticas de morosidad en tarjetas de crédito, alcanzando niveles que no se veían desde antes de la crisis sanitaria de 2020, según la Reserva Federal de Nueva York. Para muchos, reducir gastos en videojuegos no es una elección, sino una necesidad para evitar agravar sus deudas.
El economista Shannon Grein, de Wells Fargo, resume el panorama: este grupo enfrenta más presiones que las generaciones mayores y, aunque tradicionalmente los jóvenes han contado con más libertad para destinar parte de sus ingresos al ocio, hoy la realidad económica les obliga a restringirse incluso en ese aspecto.