Elementos de la SSPC, de la GN y de la Sedena participaron en el dispositivo de protección para resguardar al "Narco de Narcos"
Por: Brayam Chávez
El narcotraficante Rafael Caro Quintero, de 72 años, abandonó la Cárcel del Altiplano, en Toluca, Estado de México, este martes, para ser internado en un hospital para un examen habitual debido a las dificultades de salud que ha sufrido desde hace tiempo.
¿CÓMO SE LLEVÓ A CABO EL TRASLADO?
El procedimiento se llevó a cabo en el hospital Adolfo López Mateos, perteneciente al Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), siguiendo rigurosos protocolos de seguridad, tras una cirugía realizada hace un mes por Quintero debido a una afección de la próstata. Según los informes, desde las 8:00 horas se implementó el dispositivo de seguridad en el hospital, donde se brindó atención al exlíder del cártel de Guadalajara. Quintero, que fue llevado al lugar por vía aérea, retornó a la cárcel tras abandonar el centro médico, a las 8:45 horas. Elementos de la SSPC, de la Guardia Nacional (GN) y de la Sedena se encontraban presentes.
UNA SEGUNDA VISITA AL HOSPITAL
El 20 de septiembre, Caro Quintero fue trasladado al hospital de alta especialidad, supuestamente debido a una hipertrofia de próstata de grado IV, razón por la cual se le programó una operación previamente programada. Desde que fue detenido, el narcotraficante ha padecido afecciones médicas vinculadas a ese órgano y ha experimentado múltiples intervenciones quirúrgicas. En 2022, las Fuerzas Armadas arrestaron a Caro Quintero en Sinaloa, tras estar evadido de la justicia desde 2013.
¿QUIÉN ES RAFAEL CARO QUINTERO?
"El narco de narcos" fue uno de los capos más destacados de la década de los ochenta y uno de los pioneros en el envío masivo de drogas hacia Estados Unidos. Quintero nació el 3 de octubre de 1952 en una finca de Badiraguato, Sinaloa, hogar de destacados narcotraficantes mexicanos como Joaquín "El Chapo" Guzmán, y amasó una considerable fortuna al punto de ofrecer, según se rumorea, saldar la deuda externa del país para permitirle continuar con su actividad.
Quintero es un pionero en la creación del Cártel de Guadalajara (posteriormente Cártel de Sinaloa), al que la DEA proponía un premio de 20 millones de dólares. La DEA lo ha detenido por el secuestro y homicidio del agente Enrique "Kiki" Camarena en 1985, así como por otros delitos vinculados al tráfico de marihuana y cocaína, así como por delincuencia organizada en colaboración con Miguel Ángel Félix Gallardo "El Jefe de Jefes" y Ernesto Fonseca Carrillo "El Neto", pese a que él ha negado su implicación en su tortura y asesinato.