Aunque el 28 de diciembre está asociado con bromas y chistes, esta celebración tiene una trágica historia en su origen
Por: Andrés Manuel Contreras Alaniz
En México, las bromas más ingeniosas suelen reservarse para el Día de los Santos Inocentes, extendiéndose esta tradición al ámbito de las redes sociales, donde a menudo se comparten noticias falsas.
Sin embargo, es importante aclarar que aunque el 28 de diciembre está asociado con bromas y chistes, esta celebración tiene una trágica historia en su origen.
ORÍGENES
La fecha, marcada por la Iglesia Católica como la celebración de los Santos Inocentes, recuerda la matanza de niños ordenada por el rey Herodes en Palestina.
Según relata la Biblia, los Magos de Oriente consultaron a Herodes sobre el nacimiento del "rey nacido en Belén". Enterado de que Jesús representaba una amenaza para su reinado, el gobernante ordenó la ejecución de todos los bebés menores de dos años.
Se estima que alrededor de 20 niños perdieron la vida, según cálculos históricos basados en la población de la región en esa época.
Sin embargo, José y María lograron escapar a Egipto para proteger a su hijo de la masacre, viviendo allí los primeros años de la vida de Jesús, según narra la Biblia.
Aunque no se conoce la fecha exacta en que Herodes emitió la orden, el Día de los Inocentes se conmemora el 28 de diciembre, dentro de los ocho días posteriores al nacimiento de Jesús, tras la celebración de la Navidad.
¿Y POR QUÉ SE HACEN BROMAS EN EL DÍA DE LOS INOCENTES?
Según la Iglesia Católica, la tradición de gastar bromas en esta fecha tiene sus raíces en la Edad Media, cuando en Europa se llevaba a cabo la "Fiesta de los Locos" al final del año, nombrando a un "Rey de los Inocentes" encargado de realizar bromas a la población.
En ese período, a los padres se les permitía renunciar temporalmente a sus responsabilidades, y a los monjes se les autorizaba actuar como abades.
Debido a la cercanía del Día de los Inocentes con esta festividad, ambas celebraciones combinaron sus tradiciones, y la costumbre de hacer bromas ha perdurado hasta nuestros días.
Además, al concluir una broma el 28 de diciembre, es común escuchar la frase: "Inocente palomita que te dejaste engañar".