¿De cuánto es la fortuna de Elon Musk? Así aumentó tras la victoria de Trump

La influencia de Musk ha sido tal que Trump le ha asignado la tarea de liderar el recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental

Por: César Omar Leyva

 La fortuna de Elon Musk ha alcanzado los 314 mil millones de dólares tras la reciente victoria electoral de Donald Trump. Esta cifra marca un aumento de 85 mil millones de dólares en lo que va del año, atribuido principalmente a la subida en Bolsa de Tesla y la expectativa de una regulación más flexible bajo la nueva administración republicana.

Según un artículo de El País escrito por el analista Miguel Jiménez, casi todo ese incremento se ha concentrado en poco más de dos semanas y ha habido dos factores decisivos para ello. El pasado 23 de octubre, la fortuna del magnate estaba valorada en 237 mil millones de dólares.

FACTOR DE APOYO EN CAMPAÑA DE TRUMP

Durante la última campaña electoral, Musk se posicionó como uno de los mayores aliados y donantes de Trump , contribuyendo con al menos 120 millones de dólares a su campaña. El mercado anticipa que la victoria de Trump beneficiará a los negocios de Musk, que abarcan desde Tesla y SpaceX hasta Neuralink y su empresa de inteligencia artificial xAI, gracias a una posible relajación en la regulación federal.

En un discurso reciente, Musk enfatizó la necesidad de un sistema nacional de aprobación para los vehículos autónomos, sugiriendo que este enfoque no solo favorecería a Tesla, sino a toda la industria. La influencia de Musk ha sido tal que Trump le ha asignado la tarea de liderar el recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental, que se enfocará en optimizar la burocracia estatal.

Este ascenso meteórico lo deja con una ventaja de 84 mil millones sobre Jeff Bezos, de Amazon, y a pocos pasos de su propio récord histórico de 330 mil millones de dólares.

BUSCA MUSK MODIFICAR REGLAS SATELITALES MUNDIALES 

A principios de agosto, cuando la actividad corporativa estaba en una pausa de verano, SpaceX, de Elon Musk, abrió silenciosamente un nuevo frente en una batalla mundial por un recurso escaso y preciado: el espectro radioeléctrico.

Su objetivo era una oscura regulación internacional que rige la forma en que el espectro, la autopista invisible de ondas electromagnéticas que habilita toda la tecnología inalámbrica, es compartida por los operadores de satélites en diferentes órbitas. Y el arma elegida fue la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos (EU).

El 9 de agosto, SpaceX solicitó a la FCC que relajara los límites de potencia acordados en las transmisiones de operadores como él mismo en la órbita baja terrestre, la región del espacio hasta 2 mil kilómetros (km) por encima de la superficie del planeta que se convertirá en un escenario fundamental para el futuro de las comunicaciones, el transporte y la defensa.