La falla de San Andrés podría ocasionar un terremoto de magnitud 8 y una catástrofe global, según los investigadores

La cicatriz geológica que se extiende a lo largo de la costa oeste de los Estados Unidos y alcanza a Baja California mantiene intrigados a expertos

Por: Brayam Chávez

La falla de San Andrés es una de las fracturas geológicas más famosas a nivel global. Es una extensa grieta en la corteza de la tierra que se extiende a lo largo del estado de California, en Estados Unidos, extendiéndose por cerca de mil 300 kilómetros.

La falla se extiende por la costa oeste de Estados Unidos hasta alcanzar Baja California, en México, y últimamente está generando inquietud a los científicos y especialistas en sismología aún más que en las últimas décadas, ya que los expertos señalan que la falla de San Andrés está enmarcada en un ciclo de ruptura, lo que implica que un terremoto de gran magnitud podría suceder en cualquier instante.

¿UN DAÑO A NIVEL GLOBAL?

Los especialistas en geología sostienen que este tipo de errores son revolucionarios. ¿Qué intentan expresar con eso? Las dos placas tectónicas se deslizan lateralmente entre sí. La acumulación de tensión en esta zona, provocada por el movimiento de las placas, genera un peligro considerable de sismos en la zona.

Se considera que la falla de San Andrés podría provocar un "caos mundial" debido a diversos factores, en particular por la posibilidad de un sismo catastrófico, denominado el "Big One".

Este posible sismo de gran envergadura podría arrasar con ciudades relevantes como Los Ángeles y San Francisco, impactando no solo a millones de individuos en la zona, sino también la economía mundial. La zona de California es una de las más densamente pobladas y con mayor actividad económica a nivel global, y un desastre de esta magnitud podría paralizar el comercio, las cadenas de abastecimiento y las infraestructuras fundamentales a una escala nunca antes vista.

OTRAS CONSECUENCIAS DEL SISMO A GRAN ESCALA.

Además, un sismo de la magnitud que todos temen podría provocar impactos en otros sistemas naturales y de infraestructura. Por ejemplo, podrían surgir interrupciones en las redes de gas y electricidad, fuegos urbanos complicados de controlar y perjuicios en puertos y aeropuertos, lo que detendría temporalmente el transporte y la economía de una zona vital.

Es extremadamente difícil anticipar los sismos; sin embargo, investigaciones enfocadas en la sismología sostienen que la Falla de San Andrés ha acumulado energía suficiente para desencadenar un terremoto de magnitudes catastróficas. Es imposible determinar cuándo sucederá, por ahora.