En la misiva, la señora ofrece disculpa pública y pide perdón; el creador de contenido permanece en el penal de Barrientos, donde dijo está amenazado
Por: Edel Osuna
El caso de agresión por el que el influencer Rodolfo “Fofo” Márquez, de 26 años de edad, está recluido en el penal de Barrientos, en el Estado de México, donde, dijo, su cabeza tiene precio y que prefería la silla eléctrica a estar en prisión, sigue dando de qué hablar, pues ahora la madre del joven se hizo presente con una carta.
En la misiva, la madre del también creador de contenido ofreció a la afectada, Edith Márquez, una disculpa pública por los hechos suscitados el 4 de abril en un estacionamiento de un centro comercial ubicado en Naucalpan.
En la carta, Sandra, la mamá de “Fofo”, además de disculparse con la afectada, le pidió perdón, palabras que levantaron polémica entre los internautas.
"Lamento profundamente la dolorosa situación a la que mi hijo la llevó. No tengo palabras suficientes para expresarle mis más sinceras disculpas y en nombre de él, mío y de toda nuestra familia, deseo pedirle perdón".
Prosigue con que conocía las carencias que había tenido como madre, las que condujeron a la situación en que ahora se encuentran su familia y, principalmente, la afectada.
"He cometido errores y he fallado en mi responsabilidad como madre; ahora enfrento las dolorosas consecuencias de esos errores. Sin embargo, entiendo que el verdadero sufrimiento lo ha vivido usted y su familia".
Afirmó que “Fofo” está aprendiendo la lección y que ahora, él sabe que debe asumir las consecuencias de sus actos, refiriéndose a las agresiones de las que Edith ‘N’ fue objeto.
“Rodolfo está tremendamente arrepentido y sabe que debe asumir las consecuencias de sus cobardes agresiones las cuales sin duda marcaran un antes y un después en su vida. Esta es la lección más dura que ha tenido que aprender, una lección que yo, desafortunadamente, no supe enseñarle a tiempo”.
“Fofo” Márquez es un influencer y creador de contenidos que se volvió popular por las polémicas en que se veía envuelto, como lo ocurrido cuando cerró una importante arteria en Guadalajara y que no hubo consecuencias jurídicas.
Y aunque cuando fue arrestado por mostró una sonrisa confiado, quizá, en que nada pasaría, esta vez el destino le jugó la contraria y ahora enfrenta las consecuencias de sus actos.