Si buscas lucir una piel suave, hidratada y sin imperfecciones, esta crema a base de dos ingredientes es para ti. Con esta mascarilla casera conseguirás una dermis tersa, revitalizada y sin rastros de los famosos signos de la edad.
Hacerla es muy fácil y solo necesitas dos ingredientes: avena y miel. Aplicando este remedio casero y natural de forma frecuente obtendrás resultados visibles en muy poco tiempo.

¿CÓMO HACER LA MASCARILLA DE MIEL Y AVENA PARA LA PIEL?
Para comenzar con esta mascarilla casera solo debes mezclar una cucharada de miel y 50 gramos de avena cocida. Luego, revuelve bien estos ingredientes hasta una preparación homogénea y pastosa.
El siguiente paso será aplicar una capa delgada y uniforme de la mascarilla sobre la piel limpia y seca, evitado el contorno de ojos y labios. Deja actuar durante 10 o 15 minutos y enjuaga con agua tibia. Por último, seca tu rostro de forma suave, sin presionar, y aplica una crema hidratante.
Antes de colocar el producto en el rostro, recuerda hacer una pequeña prueba de alergia para descartar que los ingredientes vayan a ocasionarte irritaciones o molestias en la piel.
¿CUÁLES SON LOS BENEFICIOS DE LA MIEL Y LA AVENA?
Esta mascarilla casera y natural para el rostro brinda múltiples beneficios debido a que sus ingredientes poseen grandes propiedades para la piel.
La miel:
- Limpia la piel
- Reduce la inflamación asociada a los poros obstruidos
- Promueve la cicatrización.
- Contribuye a extraer suavemente la suciedad y el exceso de sebo de los poros.
- Proporciona una hidratación profunda
- Cuenta con propiedades antibacterianas y antiinflamatorias
- Actúa como un exfoliante suave
- Reduce la apariencia de arrugas, cicatrices y manchas
- Promueve un tono uniforme
La avena:
- Hidrata profundamente la piel
- Actúa como un exfoliante suave
- Reduce la inflamación.
- Alivia irritaciones
- Brinda protección antioxidante
- Posee propiedades calmantes útiles para pieles sensibles o con problemas como eccema y psoriasis.

Esta poderosa mascarilla natural hará que tu piel se renueve y luzca fresca, sin imperfecciones y con un tono uniforme.