Ahora el panorama para los ganaderos es otro: las lluvias registradas desde mediados de junio han dejado un acumulado de entre ocho y diez pulgadas en algunos ranchos.
Nicolás Campa Romero indicó que los agostaderos se han recuperado, lo que beneficia al ganadero, ya que se reducen los costos de producción.
El presidente de la Asociación Ganadera Local del Valle del Yaqui (Aglvy) apuntó que, de continuar las lluvias en agosto, se garantiza el pasto hasta finales de año, que es cuando se empieza a dar minerales, pero continúa el pasto seco.
Señaló que para que un rancho pase de un año a otro con buen agostadero, necesita que le llueva entre 17 y 20 pulgadas, por lo que esperan que sigan las lluvias en agosto.
"Estamos muy contentos, los agostaderos en el sur de Sonora llevan un acumulado entre ocho y diez pulgadas. Las cuencas del Cocoraque, la Presa y otros arroyos están corriendo, y esto fortalece los veneros de todas las norias y pozos de los ranchos", comentó.
ALIMENTO
Respecto a la venta de alimento con subsidio del Gobierno federal, subrayó que a través de la Aglvy se han comercializado entre 30 y 40 mil toneladas del suplemento 20-30 y el Torete, en cien pesos el saco, y están por llegar otras diez toneladas.