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Rebelión de gobernadores


Quizá muchos le echen la culpa a que son conservadores, neoliberales o simplemente integrantes de la mafia del poder, pero lo cierto es que al menos 10 gobernadores de PRI, PAN, Movimiento Ciudadano y uno independiente, dejaron de pertenecer a la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).

Quizá muchos le echen la culpa a que son conservadores, neoliberales o simplemente integrantes de la mafia del poder, pero lo cierto es que al menos 10 gobernadores de PRI, PAN, Movimiento Ciudadano y uno independiente, dejaron de pertenecer a la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).


Reunidos en Chihuahua, los mandatarios estatales, integrantes de la Alianza Federalista por México, anunciaron su salida del bloque formado cuando Vicente Fox Quesada era Presidente de la República.

Según los gobernadores, la Conago “es un mecanismo que ya no cumple la función para la que nació, como un espacio de deliberación para defender el federalismo y la soberanía de los estados, como promover la consolidación de una relación de respeto y colaboración entre los tres niveles de gobierno y consolidar la descentralización y fortalecer el federalismo”.

Además, consideran, Conago perdió fuerza y todo el potencial que tenía como un órgano de interlocución entre gobernadores.

“Hoy ni siquiera funciona como mecanismo de diálogo, y se convirtió en una entelequia que fue mermada por el reparto discrecional de los recursos federales”.

Usted me va a tildar de loco, pero esta rendija por la que los mandatarios salieron puede ser la clave para que la puerta entera se caiga sin que haya alguien con la agudeza mental suficiente para detener la estampida.

Los gobernadores del PAN que ya no estarán en Conago son Javier Corral, de Chihuahua; Francisco García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas; José Rosas Aispuro, de Durango; Diego Sinhue Rodríguez, de Guanajuato, y Martín Orozco, de Aguascalientes.

Además, Jaime Rodríguez, de Nuevo León, que llegó al poder por la vía Independiente, así como Enrique Alfaro, de Jalisco, por Movimiento Ciudadano; Miguel Riquelme, de Coahuila, y José Ignacio Peralta, de Colima, por el PRI, y Silvano Aureoles, de Michoacán, por el PRD.

"Hemos resuelto poner fin a nuestra participación en la Conferencia Nacional de Gobernadores, de forma unánime vamos a dejar de integrar esta instancia, con el propósito de construir nosotros un espacio de diálogo efectivo, de colaboración efectiva, no solamente con nuestros demás compañeros, gobernadores de otras entidades, y con el Gobierno federal, los poderes de la unión, los poderes de Gobierno", expuso el anfitrión Javier Corral.

Desde la perspectiva federalista, tiene que analizarse que esta escisión no significa, en principio, la ruptura con el resto de los poderes o gobernadores, pero sí es una advertencia de que algo no está bien y que deben apresurarse los funcionarios federales a tratar de enmendar el conflicto antes de que sea demasiado tarde.

¿Cuántos más podrían unirse a este bloque en los próximos días si las condiciones del país persisten, sobre todo en lo relacionado a la distribución del presupuesto hacia las entidades federativas?

En momentos en que se habla de una transformación de México, el horno no está para bollos y mas vale al panadero no echarle más levadura a la masa con recortes al gasto estatal y municipal, pero ninguno para el federal.

Este país no va a crecer solamente con las aportaciones de la Ciudad de México sino que requiere del concurso de cada una de sus regiones.

De otra forma, el federalismo mexicano no tendrá razón de ser.

Comentarios: franciscogonzalez.bolon@gmail.com