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Policiaca

Descansa, Liliana, tu papá te encontró y te lleva a casa

Contra pronóstico oficial, y con las carencias propias de su situación económica, hombre halla el cadáver de su hija, quien murió ahogada
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Contra pronóstico oficial, y con las carencias propias de su situación económica, hombre halla el cadáver de su hija, quien murió ahogada


El martes 22 de marzo, una joven llamada Liliana Márquez se sumergió en el agua del río Bravo, en Matamoros, y ya no salió. El dolor se apoderó de su padre, quien ante los nulos resultados de las autoridades se prometió que encontraría su cuerpo y lo llevaría a casa, para que le sepultaran. Y lo logró.

Afligido y determinado, Pascual Márquez se echó a cuestas, buscar desde el primer día a su hija en una pequeña y desvencijada lancha que le prestaron y tenía agujeros.

Y cada día que pasaba encendía una veladora, la colocaba en una pequeña balsa y la dejaba ir por el río, pensando que quizá la tenue lengua de fuego lo guiara hasta el cuerpo de su amada hija.

La familia de la malograda jovencita es de escasos recursos, pero eso no mermó en el ánimo de Pascual, quien se dedicó a buscarla, y a cada remada gritaba: "¿dónde estás, hija?”, clamor que estremece a quienes desde la orilla siguieron su búsqueda incansable.

Este mismo jueves logró encontrar la mochila de su pequeña (pues para los padres que aman sus hijos jamás dejan de ser sus niños), en el cual estaban su teléfono y dos cambios de ropa, por lo que Pascual no perdió la fe de hallarla.

Su búsqueda rindió frutos, pues al poco, en la pequeña embarcación, el hombre avistó el cuerpo de Liliana: lo fijó al bote y lo llevó hasta la orilla; sólo entonces Pascual rompió en llanto.

“¡Este río está maldito!”, grito el hombre en un mar de lágrimas, a la vez que lamentaba que los cuerpos de emergencia lo dejaran solo.

Sólo entonces, peritos de la Fiscalía de Justicia de Tamaulipas (FGJET) se presentaron no a buscar el cadáver, sino a dar fe, pues la tarea de los rescatistas la hizo el amor de un padre por su retoño.

El cuerpo de Liliana fue llevado al Servicio Médico Forense (Semefo), donde se practicará la necropsia de rigor, y entregarán los restos de la joven a su familia, para que sea sepultada y tengan un sitio dónde visitarla.