
El vínculo operístico que existían entre Plácido Domingo con Estados Unidos ha llegado a su fin.
Y es que derivado de la investigación que por acoso sexual se ceñía sobre el tenor español, ha renunciado a la dirección general de la Ópera de Los Ángeles que desde 2003 encabezaba.
"Las recientes acusaciones contra mí en la prensa han creado una atmósfera que dificulta mi capacidad para servir a esta compañía que tanto quiero", señala el ibérico en un comunicado.
Anteriormente, el 26 de septiembre el tenor había dado a conocer su retiro de la Ópera Metropolitana de Nueva York, en la que había participado por 51 años ininterrumpidos.
Dado a lo delicado de la situación, la Ópera de Los Ángeles entrevista a sus integrantes.
"Mientras continúo trabajando para limpiar mi nombre, he decidido que lo mejor para los intereses de LA Opera es que dimita como su director general y me retire en este momento de las actuaciones programadas", añade.
También se ha indicado que el Sindicato de Músicos de Estados Unidos le investiga y derivado de las acusaciones del 13 de agosto, la Ópera de San Francisco y la Filarmónica de Filadelfia cancelaron su actuación.
"Lo hago con pesar en el corazón y al mismo tiempo quiero expresar mis mejores deseos al Consejo y a la esforzada plantilla de LA Opera para que sigan creciendo y brillando", concluye el comunicado.