Una visita inesperada lo hace tener esperanza y alegría
Quienes tienen la fortuna de estar en libertad, viven momentos que quienes están tras las rejas difícilmente pueden hacerlo, como en la temporada navideña, una época pasarla en familia.
Pero un regalo inesperado puede "caer del cielo", como el que le ocurrió a Joaquín Guzmán Loera, "El Chapo", ex líder del Cártel de Sinaloa y que purga condena de por vida en una cárcel de Colorado, Estados Unidos.
Y en este tiempo de compartir y estar con los suyos, "El Chapo" tuvo un momento mágico, aunque no completo: recibió la visita de sus mellizas, Emalí y María Joaquina, a quienes pudo ver, pero, como en el caso de su esposa Emma Coronel, no se les permite el contacto físico, por lo que se quedó con el deseo de abrazarlas.
Las pequeñas, ya de 8 años de edad, que viven en México, visitaron a su padre, de la mano de su mamá, reunión que fue confirmada por su abogada, Mariel Colón.
Además, dijo que el solo verlas le dio alegría y positivismo para continuar peleando por su libertad y poder estar con ellas; sin embargo, no dudó que para las niñas fue difícil no poder abrazar a su padre, pues un cristal los separaba.
