¿Qué es el autismo y cómo se detecta?
Los niños que llegan a sufrir este trastorno presentan problemas serios en el lenguaje comunicativo, verbal y no verbal
El autismo es un tipo de trastorno del desarrollo que se conoce como trastorno generalizado.
En estas afecciones no solo ocurre una demora en el desarrollo, sino también un desarrollo atípico, con una significativa modificación de las funciones.
La mayor parte de los niños con trastornos del desarrollo generalizados también experimentan un retraso mental (coeficiente intelectual inferior a 70).
En los niños con autismo, se presenta un extenso espectro de severidad, con algunos síntomas más severos y otros más modestos.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DEL AUTISMO?
Probablemente, las carencias en la interacción social son las más distintivas y particulares de los niños con autismo. Desde su infancia, los niños no reaccionan ante los gestos y miradas de los adultos, no persiguen la interacción con otros, optan por jugar en solitario.
Problemas graves en el lenguaje verbal y no verbal; a menudo carecen de un lenguaje comprensible o repiten las palabras que oyen (ecolalia), modifican la secuencia de las palabras o las emplean con significados específicos para ellos.
Las conductas repetitivas o estereotipadas: solo les atrae algo de forma desmedida e inflexible (como las ruedas de los vehículos, los libros de color rojo...), que llevan a cabo rituales o rutinas reiteradas sin ninguna finalidad o movimientos estereotipados (como el aleteo de las manos).
¿CÓMO SE DETECTA EL AUTISMO?
La evaluación del comportamiento de un niño con autismo para objetivos diagnósticos es una labor complicada que debe ser llevada a cabo por especialistas cualificados (neuropediatras, psiquiatras o psicólogos).
Es necesario llevar a cabo una completa exploración física y neurológica, incluyendo exámenes de visión y audición.
En esta etapa, es recomendable examinar la relación con la madre (o individuo que brinde prioridad al cuidado del niño), ya que usualmente proporciona información muy relevante para el diagnóstico diferencial.
Para llevar a cabo el diagnóstico del autismo, es necesario identificar déficits graves en tres aspectos fundamentales:
- Dificultades cualitativas en la interacción social.
- Alteración en la comunicación cualitativa.
- Conductas, intereses y actividades limitados, repetitivos y estereotipados.
