En redes sociales los internautas señalaban que el juez de tercera base tenía un comportamiento inapropiado y hasta lo acusan de borracho
Por: Edel Osuna
El beisbol es conocido como el rey de los deportes, por ser sumamente impredecible, pero en esta ocasión no se debió a una jugada, sino al comportamiento de uno de los ampáyeres, que tuvo que ser desalojado del terreno con la fuerza pública.
Y es que no se debió al criterio del árbitro en una jugada, sino a su errático proceder durante un duelo de pelota celebrado este domingo pasado, pues cuestionaba el desempeño tanto de sus compañeros de trabajo, como de los peloteros y mánagers.
El insólito hecho se desarrolló durante el tercer encuentro entre Venados de Mazatlán y Mayos de Navojoa, en el estadio Teodoro Mariscal, del puerto sinalonese.
Se trata del experimentado ampáyer de tercera base, Humberto "Lobito" Saiz, quien desde que inició el juego tuvo un comportamiento errático, extraño y hasta se puso a hace señales obscenas a los aficionados.
Dado a que su proceder era totalmente inaceptable, en la parte baja de la novena entrada fue necesaria la intervención de la Policía Municipal para sacarlo del terreno y lo remitieron a barandilla.
Los uniformados llegaron, le pusieron las manos detrás de la nuca y lo llevaron casi a cuestas, pues se opuso a que lo echaran.
Cuando era sacado del campo, el respetable rompió en aplausos por la decisión, en un partido que se definió en entradas extra.
La directiva del club Venados, ni la de la Liga Mexicana del Pacífico se han pronunciado al respecto; sin embargo, trascendió que debido a su proceder fue suspendido indefinidamente.
En redes sociales, los aficionados que acudieron al Teodoro Mariscal acusaron que el ampáyer se había presentado a trabajar en estado inconveniente o en estado de ebriedad.