¿Por qué sigues viendo el juego incluso después de apagar tu consola? Esto es el Efecto Tetris

El término nació gracias a los jugadores que aseguraban ver las piezas del juego incluso después de acostarse a dormir

Por: Brayam Chávez

Cuando una persona pasa horas enfocada en la misma actividad ya sea armando rompecabezas, practicando un deporte o incluso jugando videojuegos, es común que, al cerrar los ojos, sigan apareciendo imágenes de aquello que hizo durante el día. Este curioso fenómeno, conocido como Efecto Tetris, muestra cómo el cerebro continúa procesando información aun cuando la actividad ya terminó.

QUÉ ES EL EFECTO TETRIS Y POR QUÉ SUCEDE

El término nació gracias a los jugadores de Tetris que aseguraban ver las piezas del juego incluso después de acostarse a dormir. Sin embargo, investigaciones citadas por la revista Nature revelan que ocurre tras todo tipo de actividades repetitivas: rutinas físicas intensas, prácticas musicales, entrenamientos prolongados o trabajos mecánicos.

Los especialistas en neurociencia explican que el cerebro reproduce estas imágenes porque intenta reforzar lo que considera importante. Al repetir mentalmente aquello que acabamos de aprender, fortalece la memoria y mejora habilidades, por lo que es normal que estas escenas aparezcan en sueños, momentos de descanso o pensamientos automáticos.

¿SE PUEDEN DIRIGIR LOS SUEÑOS CON ESTE EFECTO?

Estudios encabezados por Adam Haar Horowitz, del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), señalaron que el Efecto Tetris puede utilizarse como una herramienta para orientar sueños hacia temas específicos. Esta técnica, conocida como "incubación de sueños", permite que la mente genere imágenes relacionadas con un tema sugerido, como paisajes, formas o escenas creativas.

Los participantes de estas investigaciones reportaron un incremento notable en ideas y creatividad después de soñar repetidamente con lo propuesto. Esto refuerza la idea de que el cerebro continúa trabajando en la solución de problemas durante el sueño.

APLICACIONES DEL EFECTO TETRIS EN SALUD MENTAL

La neurocientífica Emily Holmes, de la Universidad de Uppsala, llevó este fenómeno al ámbito clínico. Su equipo descubrió que jugar Tetris durante unos minutos después de evocar un recuerdo traumático puede disminuir la intensidad de los flashbacks en personas con trastorno de estrés postraumático.

La explicación es directa: la mente no puede sostener dos imágenes intensas al mismo tiempo. Al concentrarse en el juego, se reduce la fuerza del recuerdo traumático, facilitando que los pensamientos intrusivos pierdan peso emocional.

Uno de los aspectos más valorados es que esta estrategia es barata, fácil de usar y no requiere equipo especializado. Datos de la National Library of Medicine señalan que muchos pacientes agradecen contar con una herramienta que pueden aplicar por sí mismos.

Personas que han atravesado pérdidas recientes compartieron que esta técnica les ayudó a disminuir la frecuencia de pensamientos difíciles, permitiéndoles enfocar mejor su energía en actividades cotidianas y en recuerdos menos dolorosos.

¿SOLO OCURRE CON VIDEOJUEGOS?

Aunque el nombre provenga de un videojuego clásico, el Efecto Tetris aparece en una variedad de actividades repetitivas: tocar el mismo fragmento musical una y otra vez, practicar un movimiento deportivo o realizar trabajo físico continuo. En todos los casos, el cerebro sigue "repasando" la experiencia para fijar el aprendizaje.

Esto demuestra que la mente no se desconecta completamente al descansar. Mientras dormimos, reorganiza información, fortalece recuerdos y ajusta habilidades.

LO QUE EL EFECTO TETRIS REVELA SOBRE NUESTRA MENTE

Este fenómeno ha abierto nuevas líneas de investigación sobre la memoria, el sueño y la imaginación. Expertos señalan que marca un punto importante en la comprensión de cómo nuestras rutinas influyen en los procesos mentales, incluso sin darnos cuenta.

Más allá de ser una simple curiosidad, el Efecto Tetris ha permitido desarrollar técnicas para mejorar la salud mental, potenciar habilidades y entender mejor cómo nuestra mente trabaja silenciosamente en segundo plano. Lo que hacemos durante el día no desaparece cuando descansamos: sigue activo, reorganizándose y transformándose mientras dormimos.