Por: Eduardo Sánchez
Aunque hace unos días, la WBO había ordenado la subasta que se llevaría a cabo ayer, los representantes de ambos peleadores llegaron a un acuerdo, confirmando el choque entre el campeón mundial mexicano y el irlandés para tal fecha en uno de los escenarios más espectaculares de la Sultana del Norte.
El púgil fronterizo inició su reinado en mayo del año pasado al imponerse por nocaut al estadounidense Sadam Ali en Verona, Nueva York.
Al tener la intención de invadir la división inmediata esta podría ser la última exposición de su campeonato o la antepenúltima en caso que tenga una buena oferta para mantenerse en este peso, también considerando que gane el combate que le espera; a este duelo llegará con foja de 32-0, 26 anestesiados.
Por su parte, el radicado en Australia presume seis victorias en fila desde su único descalabro en diciembre de 2015 ante Jack Culcay, ganando a la fecha distintos títulos regionales.
El irlandés, primer clasificado en las 154 libras en las listas de la WBO, llegará a este compromiso con marca de 28-1-1, 7 antes del límite.