A lo largo de la historia, un descuido, un error o una observación inesperada han dado lugar a inventos que hoy forman parte de la vida cotidiana
Por: Jhoanna Ontiveros Peraza
En el mundo de la ciencia y la innovación, muchas veces los descubrimientos más trascendentales no surgen de un plan meticuloso ni de un experimento calculado al detalle, sino de la casualidad.
A lo largo de la historia, un descuido, un error o una observación inesperada han dado lugar a inventos que hoy forman parte de la vida cotidiana y que sería difícil imaginar que alguna vez no existieron.
INVENTOS GENIALES QUE USAS A DIARIO Y QUE NACIERON DE UN SIMPLE ACCIDENTE
Desde avances médicos que salvaron millones de vidas hasta utensilios de cocina que facilitan la rutina diaria, estos hallazgos accidentales demuestran que la genialidad también puede encontrarse en lo inesperado.
Estos son cinco inventos sorprendentes que nacieron de un accidente y que seguramente usas o conoces muy bien:
PENICILINA
El accidente: En 1928, el científico Alexander Fleming regresó de unas vacaciones y notó que en una de sus placas de cultivo de bacterias había aparecido un hongo que impedía el crecimiento bacteriano alrededor.
El invento: Así nació la penicilina, el primer antibiótico de la historia, que revolucionó la medicina y permitió tratar infecciones bacterianas que antes resultaban mortales.
GALLETAS CON CHISPAS DE CHOCOLATE
El accidente: En 1930, Ruth Wakefield, propietaria de Toll House Inn, intentaba preparar galletas de chocolate, pero se quedó sin el ingrediente principal. En su lugar, usó trozos de chocolate Nestlé esperando que se derritieran en la masa, pero mantuvieron su forma.
El invento: Sin proponérselo, creó las famosas galletas con chispas de chocolate, que se convirtieron en uno de los postres más populares del mundo.
HORNO DE MICROONDAS
El accidente: En 1945, el ingeniero Percy Spencer experimentaba con un tubo de vacío para radares cuando descubrió que una barra de chocolate en su bolsillo se había derretido por la radiación. Intrigado, probó con granos de maíz, que reventaron en palomitas.
El invento: Ese momento dio origen al horno de microondas, hoy presente en millones de hogares como uno de los electrodomésticos más utilizados.
VELCRO
El accidente: El ingeniero suizo George de Mestral observó cómo las semillas de bardana se pegaban a su ropa y al pelo de su perro durante un paseo por los Alpes.
El invento: Al examinar las semillas bajo un microscopio, descubrió que tenían diminutos ganchos, lo que lo inspiró a crear el velcro, un sistema de cierre práctico y duradero que revolucionó la industria textil.
TEFLÓN
El accidente: En 1930, el químico Roy Plunkett, de la empresa DuPont, experimentaba con gases refrigerantes cuando descubrió que uno de ellos se había convertido espontáneamente en una sustancia blanca, cerosa y muy resbaladiza.
El invento: Se trataba del politetrafluoroetileno, mejor conocido como teflón, que hoy se utiliza en utensilios de cocina antiadherentes, equipos médicos e incluso en aplicaciones aeroespaciales.
Estos cinco inventos son prueba de que la creatividad y la innovación no siempre siguen un camino lineal.