Vuelven extorsiones

Van por lo menos tres víctimas en las últimas semanas, uno de los casos se logró consumar

Por: Édgar Coronado

A pesar de que en Navojoa
durante los últimos años no se habían tenido reportes por el delito de extorsión
, ha tenido un repunte durante las últimas semanas y se han denunciado por lo menos tres y uno de ellos fue consumado.

Javier Adolfo Alatorre Correa, comisario de Seguridad Pública Municipal, explicó que, este delito representa un riesgo para las familias, ya que es a través de llamadas telefónicas el modo de operación, relacionándolo con presuntos secuestros o daños al círculo cercano a las víctimas.

Mencionó que se percataron del hecho, luego de que familiares denunciaran la desaparición de las víctimas, quienes son aisladas por medio de una llamada telefónica y posteriormente se les solicita dinero a sus familias a cambio de revelar su paradero.+

Ante ello, señaló que una de las victimas si logró pagar por la extorsión, con un monto cercano a los 40 mil pesos antes de solicitar el apoyo de los elementos policiacos.

Alatorre Correa informó que, a raíz de ello, han solicitado el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública y la Policía Cibernética para dar seguimiento a los casos y evitar que sigan sucediendo, al atentar principalmente con el patrimonio familiar.

Reveló que el tema de las redes sociales ha sido una herramienta utilizada por los extorsionadores para recabar datos confidenciales e intimidar al afectado, por lo que pidió a la sociedad el limitar la información que se da a conocer por ese medio para no exponer a sus familias.

Pidió a su vez a la sociedad el hacer uso de las aplicaciones cibernéticas del Gobierno del Estado que pueden descargarse fácil y en forma gratuita, como los son “Mujeres Seguras” y “Antiextorsión Sonora” como parte de la prevención, además de utilizar los números de emergencias 911 y 089 para solicitudes de auxilio.

Una recomendación clave para quienes reciban llamadas telefónicas con fines de extorsión es, jamás incomunicarse, ya que los delincuentes apuestan al impacto e intranquilidad del contacto para actuar impunemente