Por: Eduardo Sánchez
Indicó que en el centro, ubicado en la colonia Tepeyac, se atiende actualmente a 20 hombres y cuatro mujeres, que enfrentan problemas de adicción al “cristal” y al alcohol.
Señaló que a los internos les da mucho control, en cuanto a su vida y emociones, el programa de purificación con el sauna, “con el que se saca la droga del cuerpo”.
“Pero las drogas tienen dos factores, el físico y el mental; por ello, al eliminar esa parte física, hay un mayor control en la parte emocional o mental, punto éste que lo trabajamos en la academia, a través de unos procesos específicos que atacan de raíz el problema”, agregó.
Buitimea Yocupicio destacó que el Centro Narconon ha contribuido y puesto su “granito de arena” en este tema, pero consideró que ninguna medida o esfuerzos que se realicen para prevenir y reducir la problemática será útil, si primero no se atiende el factor de la amplia facilidad y disponibilidad que se tiene para adquirir bebidas embriagantes y drogas.
Lamentó que actualmente se esté observando a muchas personas, muchas adolescentes, casi unas niñas, tomando una cerveza. “Es un problema inocultable y que, en lugar de disminuir, va en aumento, lo que da entrada a consumo de otras drogas”, agregó.