Por: Redacción
En 2017, un ex funcionario de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) pronosticó una severa sequía en el Río Mayo, producto de la falta de lluvias y humedad en el subsuelo.Fabián Pérez
"Si no respetamos la naturaleza, pronto Navojoa podría ser una ciudad fantasma”, comentó.
En 2016, ha sido la última ocasión que ha corrido agua por el afluente y desde entonces, la flora y fauna ha ido muriendo lentamente, por la escasa humedad que hay en el lugar.
El especialista, quien prefirió guardar su identidad, confesó que, en su momento, vaticinó este escenario fantasmal en el Río Mayo, donde muchos árboles están en riesgo de morir por la falta de agua.
Recordó que las lluvias han disminuido en los últimos años en el Valle del Mayo, debido a la deforestación y la tala de árboles.
“Es importante decir que el árbol crea un sistema de baja presión y eso hace que llueva, por eso donde hay más árboles, llueve más y con mayor intensidad”, explicó.
Comentó que cuando la Comisión Federal de Electricidad construyó la Presa Adolfo Ruiz Cortines para producir energía eléctrica en las cortinas, el agua fue administrada y de esa forma las avenidas que ayudaban a que los mantos freáticos se recuperaran, empezaron a escasearse.
“Al cerrar la presa, se acabaron las inundaciones, el agua fue administrada para que bajara solo a los riegos, a partir de ahí se vino la carrera de desmonte de mezquite en todo el valle”, recordó.
SIN CONCIENCIA
Asegura que desde aquellos años no ha habido una conciencia por parte de todos los niveles de Gobierno para poner a discusión el tema del agua, que actualmente está generando serios problemas en lugares desérticos.
“Ese monte que había debajo de la presa atraía lluvias, misma que se filtraba en el suelo. Los mantos acuíferos que tenían cientos de años se vieron afectados. Una vez que se empezaron a cortar esos árboles, disminuyeron las lluvias”, comentó.
Indicó que la presa capta agua de cinco municipios, tres de Sonora y dos de Chihuahua.
“Le hemos quitado oportunidad de lluvias a la región, muchas áreas donde había condiciones ya no las hay, aparte la población y las industrias han aumentado, hay más consumo, en fin, se necesita hacer algo urgente antes de que nos lamentemos”, manifestó.
Dijo que este tema no es solo de las autoridades, pues también se deben de involucrar las familias.
“Todos deben de participar en el fomento de programas de concientización y reforestación. Hoy, no vemos nada de esto, necesitamos crear una cultura del cuidado del vital recurso y empezar a cuidar la flora y fauna que tenemos, hay mucho por hacer”, indicó.
Detalló que en 1900 cuando se fundó Navojoa había 2 mil 800 habitantes, 400 de ellos en las comunidades.
“Era un pueblo chico, ahorita hay 90 mil hectáreas en el valle. Con las extracciones del subsuelo se ha podido solucionar el tema de desabasto de agua, pero es agotable, tiene su límite y está a punto de agotarse”, advirtió.
Comentó que otro problema es que se han “soltado” permisos para perforación de pozos a diestra y siniestra, pero no se ha podido reponer el agua que se extrae del subsuelo.
“El agua del subsuelo no se está reponiendo porque no hay lluvias y no hay muchos árboles que creen las condiciones”, añadió.