Por: Eduardo Sánchez
Hace tres años Ermelindo Sombra Vega partió de Navojoa a Nogales en busca de una mejor vida. En su tierra natal nunca encontró la oportunidad laboral que sí encontró en la ciudad fronteriza.
Por: Fabián Pérez
Todo marchaba bien, hasta que el último día de junio falleció por un paro respiratorio, según el acta de defunción que le entregaron a su madre, Evarista Vega Valenzuela.
Por falta de recursos económicos, los restos de Ermelindo no han podido ser trasladados hasta la comunidad de Sinahuiza, donde viven sus padres y familiares.
“De echo ahorita me hablaron de la funeraria en Nogales para avisarme que ya cremaron a mi hijo, que tienen sus cenizas, pero ahora me falta pagar los costos del servicio para poder traer sus restos a Sinahuiza”, explicó la madre.
Evarista Vega aprovechó para pedir el apoyo de la ciudadanía, ya que en estos momentos no trabaja y no cuenta con los recursos económicos para poder pagarle a la funeraria.
“La funeraria me está cobrando 15 mil pesos por el servicio, hay un hijo que me va apoyar con 7 mil pesos y otra muchacha de Hermosillo con 4 mil pesos, pero me faltaría una parte”, mencionó.
Comentó que Ermelindo, quien tenía 43 años de edad, desde niño se enfermó de un pulmón y desde entonces sufría mucho por el trabajo pesado que realizaba como albañil.
“El trabajo que desempeñaba mi hijo era muy pesado para el problema que tenía en su pulmón, ya le habíamos dicho que se viniera a Navojoa, pero él no quiso, porque se sentía bien viviendo en Nogales”, relató.
Comentó que su hijo vivía en Nogales en un taller mecánico, acompañado de otras personas.
Para las personas interesadas en apoyar económicamente lo pueden hacer al teléfono 6421058897.