La música construye o destruye conductas

Hay mensajes efectivos como proyectar cultura e identidad, pero también la parte negativa como incitador de violencia y hasta inicio a las adicciones

Por: Édgar Coronado

La música siempre ha jugado un papel fundamental en la construcción de la cultura de una sociedad y, mucho más, en la identidad de una persona, pues a través de sus letras permite revivir sentimientos y recuerdos de nuestras vidas.

En la actualidad, la música también ha influido en conductas que pueden ser el inicio a una vida delictiva, incluso fomentar el rol de las adicciones y hasta normalizar la violencia.

FOMENTO A ADICCIONES

Según José Inés Buitimea, director de Narconon en Navojoa, el tema de los narcocorridos o corridos tumbados puede llegar a ser factor para que los jóvenes se introduzcan al mundo de las adicciones, ya que el mensaje de este tipo de música no se liga a la paz, tampoco a que pueda aportar al mejoramiento de nuestras vidas.

Ya sea por moda o popularidad, este tipo de música es muy escuchada entre los jóvenes; en muchos de los casos interpretando una vida lejana a la realidad, con ocasiones en los que se predica un mal ejemplo, para lo cual consideró que muchos especialistas han coincidido en que no es lo mejor para las nuevas generaciones.

Incluso, explicó, parte de la música tiene la particularidad de fomentar el deseo por iniciar en el consumo de alcohol, pues a nivel mental, sí existe una relación entre cómo está el estado emocional y cómo lo acompaño, en muchos casos anteponiendo el consumo de alcohol.

"Hay música que sí nos lleva a sentirnos bien y vale la pena buscarlos, sin que nos incite a un tipo de vida que realmente es por moda. En el caso de los pacientes de Narconon, ellos no escuchan música, porque en ellos incrementa el deseo particular por el consumo; optamos por limitarla", añadió.

DISTINTOS EFECTOS

Para la psicóloga clínica Laura Izaguirre, el efecto de algunas canciones también incitan a normalizar la violencia, considerándolo como un medio legítimo para resolver conflictos o alcanzar el éxito, a través de una falsa realidad.

Dijo que esto no significa que se deba satanizar la música, ya que hay efectos terapéuticos que se logran a través de las melodías, cambiando el estado de ánimo y, hasta cierto punto, con un efecto positivo, considerando que hay música para todas las personas y gustos; sin embargo, vale la pena considerar la ideal.

Recordó que hay investigaciones que han coincidido en que la música tiene un impacto en el comportamiento humano, pues sus letras inciden, no sólo en el humor, también en el modo de percibir la vida, la forma de pensar, actuar y, muchas veces, en la toma de decisiones.

JÓVENES MÁS VIOLENTOS

En Navojoa, durante las últimas semanas se han evidenciado actitudes más violentas entre los jóvenes, pues se ha señalado el uso de drogas o conductas al interior del hogar como las causantes.

Hace poco más de un mes, un menor de edad fue lesionado por un grupo de jóvenes en el fraccionamiento Infonavit Sonora, agresiones que pusieron en riesgo su vida; en este caso, se logró detener a los infractores.

Sin embargo, en otros sectores de la ciudad también se ha evidenciado a jóvenes que presentan conductas encaminadas a cometer actos violentos.

Lázaro Parra, comisario de Seguridad Pública en Navojoa, explicó que sí se ha detectado más violencia entre los jóvenes, lo que ha obligado a que sea a través de grupo Geavig y Prevención del Delito como se ha ido buscando el canalizar a las instancias correspondientes.

Es primordial, explicó, una prevención generalizada en todo el Municipio, ya que actualmente los jóvenes son más vulnerables.

COMO PROYECCIÓN CULTURAL

Por otra parte, para los pueblos indígenas la música, además de ser una expresión de su rica y ancestral cultura, es una oportunidad de que esta, sus tradiciones y su lengua sobrevivan a la tendencia del olvido y el desuso.

En ese sentido, la música ha potencializado los esfuerzos contra el fenómeno de la muerte de las lenguas, ya que se trabaja de manera colaborativa por ella, pues su majestuosidad se logra gracias a las escuelas musicales comunitarias.

En la comunidad Yoreme Mayo, la agrupación Matchuk Bemela fue formada hace unos años, se trata de una agrupación que canta rap en lengua Yoreme Mayo; los jóvenes que la conforman son originarios de El Júpare, en Huatabampo, y a través de sus letras muestran las tradiciones y vida cotidiana de su pueblo.

Además, cultivan y comparten su lengua materna; su nombre significa "Nuevo amanecer", son autores de sus propias piezas e interpretan canciones de dominio público de las comunidades yoremes, pero adaptadas al rap.