Los campos lucen desolados; más de 15 mil trabajadores se encuentran sin empleo, asegura Norberto Valenzuela
Por: Raúl Armenta Rincón
Desolados se observan los campos agrícolas del Valle del Mayo por la falta de cultivos y jornaleros, en el punto más crítico de un problema que demanda apoyos emergentes por parte del Gobierno.
Norberto Valenzuela Torres, dirigente regional del Sindicato de Trabajadores Agrícolas Salvador Alvarado, señaló que a pesar de las reiteradas peticiones de programas de empleo temporal en junio, julio y agosto, aún no se obtiene una respuesta.
Estimó que unos 15 mil jornaleros de los municipios de Etchojoa, Huatabampo y Navojoa están sin trabajo al terminar las cosechas, por lo que muchos han optado por buscar oportunidades en Cajeme, Guaymas, Costa de Hermosillo, Caborca y Nogales, entre otros lugares.
“Lamentablemente, seguimos en el olvido, ya que siempre es la misma, cada vez que pasa el ciclo agrícola se pide empleo temporal, un auxilio para los trabajadores del campo, pero ninguna dependencia nos ha escuchado y, mientras tanto, aumenta el hambre en el Mayo”, afirmó.
Valenzuela Torres mencionó que hasta finales de agosto y principios de septiembre se abren algunos cultivos de legumbres, lo que aliviará la situación, “pero todavía faltan muchas semanas”.
Señaló que, por si fuera poco, los jornaleros no deben enfermarse porque las autoridades de hospitales no sacan adelante a quienes ocupan de estudios, operaciones, medicinas, entre otras cosas, que los hacen sufrir.
Asimismo, el dirigente sindical lamentó que no se esté apoyando a los productores de trigo, que generan circulante, pagan a “changarros”, lo que permite seguir trabajando a un importante sector de la población que depende de las tareas en el campo.
Por último indicó que hay varias opciones para implementar programas de ocupación laboral, como el arreglo de caminos, cercos de escuelas, centros de salud, entre otras, lo que les permitiría obtener ingresos para por lo menos comprar tortillas y frijol.