Trabajan en el campo en Fundición y otros lugares, señala Héctor Zayla, vocero de la etnia
Por: Raúl Armenta Rincón
Dijo que muchos integrantes de la tribu asentada en comunidades de Álamos emigran, debido a la falta de trabajo, a otros lugares como, por ejemplo, la Comisaría de Fundición, donde unas 50 familias laboran en invernaderos.
Lamentó que los guarijíos, tengan 27 mil hectáreas donde pueden desarrollar diversas actividades, pero que no puedan aprovecharlas debido a que el Plan de Justicia va muy lento y, además, los recursos otorgados por el Gobierno federal son muy limitados.
“Por eso muchos salen a otros municipios a buscarle, a ganar la vida, sufriendo a cambio toda clase de obstáculos, sacrificios, bajos salarios, sin prestaciones, sin servicios básicos, pero los indígenas prefieren esto porque por lo menos tienen un ingreso, que no tienen en sus lugares de origen, donde su situación es peor”, afirmó.
Esto no significa, aclaró Zayla Enríquez, que no deba atenderse el problema de la explotación laboral, pero sobre todo hay que trabajar antes, apoyando a las diferentes etnias antes de que emigren y se expongan a riesgos como los mencionados.
En el caso de los guarijíos, abundó, desde hace mucho tiempo se está pidiendo apoyo para trabajar en la pesca en la Presa Los Pilares, lo cual representa un compromiso asumido por el Gobierno con la tribu, como parte del proyecto de construcción de esa obra.